Seleccionar página

…como habían soñado sus ancestros; así logicamente caminaba entre el tumulto, formando parte de la masa de las seis y cinco de los martes. De la misma forma en que el séquito de gatos aulladores augura una noche más tranquila; así encontré acertado pensar que tanto ruido solo es la antesala de millones de silencios solitarios.

Share This
A %d blogueros les gusta esto: