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liderarse

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En las grandes escuelas y en los foros de grandes directivos, en los sitios donde se habla de innovación en este mundo, en las comidas familiares y en los templos, en los temidos despachos de las grandes consultoras… en todos estos sitios oigo hablar de liderazgo. Sobre todo oigo hablar de liderar a otros. Y como me da la sensación de que no está de moda leer Moby Dick, de que a T.E. Lawrence ya nadie le escucha, de que a los niños ya no se les cuenta cuentos de las Mil y una noches, y de que parece que los editores de libros de autoayuda estén haciendo su agosto a pesar de que ya estemos en septiembre, hoy quiero hablaros de liderarnos a nosotros mismos, de asumir lo que somos y de conocernos, de arreglarnos y reconciliarnos para que otros puedan arreglarse y reconciliarse luego. Hoy quiero hablar de lo que nos aombra, de ego, de lenguaje y del peligro de polarizar.

LO QUE NOS ASOMBRA

Deepak Chopra dijo una vez «El ser humano es el único ser consciente de su propia mortalidad. Esto trae consigo un fuerte deseo de explorar lo desconocido. Si no estás asombrado, maravillado y perplejo ante tu propio ser aún no eres totalmente humano.»

No tengo nada más que añadir a este apartado salvo una anécdota. Suelo contarla desde que me ocurrió y siempre que quiero presentarme a una persona que acabo de conocer. Esta es la breve historia: Hace poco estaba en una fiesta de un piso en la pequeña ciudad de Haarlem, en Holanda. Era ya madrugada y había tenido un día intenso pero salió una conversación que me apasionó y me metí de lleno en ella. Estuve hablando largo tiempo -alrededor de 15 minutos- en la terraza. Había varias chicas holandesas muy jóvenes que me escucharon y una de ellas estaba algo afectada por el alcohol. Se acercó a mí y me dijo: «¿Puedes pasarme algo para un porro?» Yo le dije que jamás había fumado ni probado droga alguna, que simplemente yo era así sin necesidad de estimulantes. Ella no me creyó y se fue algo enfadada. A veces explorar lo desconocido y vivir de lleno en el momento AHORA tiene estas consecuencias 😉

LA YIHAD MAYOR

Cualquier persona tras los acontecimientos que han ocurrido durante los últimos 15 años en geoestrategia, terrorismo y política internacional, sabe que el término yihad significa guerra santa. Pero muy pocos conocen que existen dos tipos de yihad. En las cabeceras de los telediarios, en la prensa y en los parlamentos internacionales todo el mundo habla de la yihad menor o el combate contra los que renuncian a la autoridad islámica y a los valores que transmitió el profeta Mahoma. Curiosamente este concepto de guerra obligatoria proviene tanto en el cristianismo como en el Islam, del concepto judío de miljemet mitzvá que aparece en la Toráh.

Sin embargo existe una yihad aún más importante dentro del Islam. Esta yihad se renueva cada día y forma parte de la vida de cada musulmán en el mundo. Es la mayor lucha jamás librada por ningún hombre y requiere virtud, habilidad y grandes dosis de valor. La yihad mayor ocurre en cada persona y es la guerra contra el nafs, nuestro ego y la dimensión más baja de la existencia humana, nuestro lado oscuro. Todo aquel que se embarque en una búsqueda espiritual tiene que dominar esta naturaleza inferior que está instalada dentro de nosotros. A esto se le denomina gran yihad o yihad mayor y se entiende como la más respetada batalla que una persona puede librar para lograr la armonía entre islam (sumisión), iman (fe) e ihsan (vida correcta). La yihad mayor se entiende en términos de compromiso y su éxito consiste en el logro pacífico e inspirador de los objetivos que uno mismo tiene en la vida gracias a la batalla continua contra el nafs (ego). 

MAPEAR NO ES VIVIR

Es extraordinario comprobar como la naturaleza del ser humano encuentra siempre su camino aunque emplee mapas diferentes. Soy un estudioso de las religiones teistas y no teistas y me gusta encontrar cada día enormes similitudes entre los diversos cuerpos doctrinales y valores de los que parten todas ellas. Pese a esos cuentos de Borges que leí durante los primeros años de mi adolescencia y en los que un hombre lograba reproducir un territorio en un mapa, como ha señalado Alfred Korzybski «el mapa no es el territorio». La semántica nos engaña. La realidad que conocemos está limitada por nuestro lenguaje, nuestro sistema nervioso y la combinación neuronal casi infinita que da lugar a lo que denominamos «realidad objetiva» y que -de nuevo curiosamente- es diferente en todos y cada uno de nosotros. Nuestros modelos mentales condicionan nuestra realidad. Aún así es interesante como dentro de las propias religiones todas ellas hablan del caracter limitante y engañoso del lenguaje. En el Dao De Jing, en los viejos poemas babilónicos, en la Toráh, en el Corán, en el Nuevo Testamento, en la tradición oral sintoista, en las viejas tribus subsaharianas, en los cuentos amazónicos, en el Guitá, en innumerables versos de los Sutras y en las cuatro nobles verdades y los tres sellos,… en todos y cada uno de estos textos se habla de lo importante que es no olvidar que nuestra representación del mundo y lo que nos ocurre es tan solo una representación y que en definitiva no debemos tomarnos demasiado en serio a nosotros mismos.

Esta entrañable coincidencia se da por una simple razón. Por muchos modelos de iPhone y de iPad que salgan, por muchas pantallas de HD y por mucho que queramos cambiar nuestra indumentaria, hay algo que permanece inalterable y es eternamente poderoso: Cualquier persona sabe distinguir a un sabio de un estúpido. Y esto, que puede carecer de importancia para muchos, es para mí la base de cualquier tipo de liderazgo y de madurez relacional. Nuestro campo de juego es el planeta Tierra y a pesar de vueling, ryanair, los trenes de alta velocidad e internet cada vez se nos hace más grande y más complejo y como decía el viejo Sagan, no existe ninguna evidencia de que nadie vaya a venir de fuera para salvarnos de nosotros mismos. Pero nos queda algo básico: Aceptar nuestras limitaciones, saber entender que no hay nadie perfecto ni debemos tender a serlo, intentar mejorarnos en los otros, no buscar grandes sistemas para resolver diminutas situaciones.

Durante este curso voy a dedicar todos mis esfuerzos a demostrar en mi trabajo diario que la gran mayoría de problemas no existen y que aquellos que existen podrían resolverse en muchos casos si nos hiciéramos responsables de ellos, si adoptáramos compromisos sencillos y evidentes, si dijéramos lo que pensamos, si nos dejáramos sentir lo que sentimos.

SUPERAR LA DUALIDAD

La mayor parte de problemas que veo cada día en mis conversaciones con las personas a las que me acerco o que se acercan a mí tienen que ver con que solemos permanecer instalados en la dualidad. Establecemos enormes barreras entre «el yo» y «los otros», entre el «inocente» y el «culpable», la mente y el cuerpo, la vida y la muerte, mis amigos y mis enemigos. Pasamos por la vida pero no nos atrevemos a vivirla. Todo esto son excusas que ni siquiera queremos analizar. Nos resulta enormemente cómodo evitar ser conscientes de la vida, de aquello que nos pasa y de lo que nos rodea, de la enorme unidad e integración de ese punto azul pálido en mitad del universo al que llamamos Tierra. Y esto que ocurre en vida, también ocurre en nuestras oficinas, donde aparentemente hemos desterrado la vida ante el altar de nuestro orgullo. Y nadie entiende por qué pero continúa haciéndolo. Y nadie sabe cómo pero se conforma con sobrevivir por encima de los otros. En otros artículos hablé de la tendencia voraz a convertirnos en víctimas de nuestra propia existencia y a entender la vida como algo que nos pasa y que nos ha sido dado y no como algo de lo que somos responsables. Hace poco, en agradecimiento a su labor con los niños más pequeños de mi comunidad, le regalé a Luis -un amigo- un cuadro que tenía colgado en la pared de mi pasillo con la reintepretación del Holstee Manifesto. En ese cuadro aparecían estas palabras: «La vida es lo que tú hagas de ella».

En algunas sesiones suelo emplear una herramienta que me gusta especialmente y que utilizo desde bien para razonar y tomar decisiones. Suelo analizar las situaciones y durante un tiempo de mi vida de hecho analizaba en exceso mi realidad hasta establecer una disección que desembocaba casi siempre en ese sabio refrán español que dice «los árboles no te dejan ver el bosque». Porque me perdía en los detalles y porque tendía a vivir sobre la complejidad. Hace bastantes años yo decía que la vida es muy sencilla pero -debo confesaros algo- en realidad no me lo creía. Quiero decir que sabía que eso era cierto pero no lo practicaba para nada. Hace bien poco me he dado cuenta de las enormes ventajas que tiene superar los detalles para disfrutar de las pequeñas cosas. Debo decir que me sigue costando mucho esfuerzo y trabajo duro ser tan solo consciente de mi sistema de referencias, de mis prejuicios y de mis modelos mentales para -en la medida de mis humildes posibilidades- intentar que no me limiten demasiado. La gran victoria no es que haya desterrado por completo todo esto sino que cada vez me afecta y condiciona un «poquito» menos. Pero de nuevo con sinceridad creo que nunca seré capaz de actuar de una forma pura, libre de prejuicios e inocua. Y además no creo que en esta supuesta perfección resida ningún nivel de sabiduría conocido, sino que más bien conocer estas limitaciones me ayudará a no dejar que me superen y a intentar cada día superarlas.

Estoy aplicando en mi profesión como mentor, facilitador y utilizando metodologías de coaching en proyectos, muchas de las anteriores lecciones aprendidas. Con gran sorpresa y enorme realización, estoy viendo que son muy útiles para la gran mayoría de personas con las que las comparto. De algún modo y en algún momento de nuestra evolución hemos olvidado que el crecimiento es curativo y hemos entendido que la búsqueda de lo complejo puede sustituir a la conciencia de lo sencillo como forma de alcanzar la felicidad. Yo creo que nos equivocamos y vivo para demostrarlo.

Claridad

Claridad

david«Hay tres cosas extremadamente duras: el acero, el diamante y conocerse a uno mismo«

Benjamin Franklin

«Don´t you cry for the lost. Smile for the living«

Life´s for the living, Passenger

«There is a time to let it grow. Ther is a time to let it slow. And a time to let it go«

CathedralCocoon

Me resulta sencillo despertar. Duermo solo con una multitud de aventuras a la espalda. Hace mucho frío y para este frío nadie ha inventado mantas. Me conozco. Detrás de mi piel siempre hubo alguien. Me dedico tiempo, las sesiones suelen ser intensas. A solas, roto y lejos de cualquier escudo, disecciono mi pecho en la búsqueda del auténtico tesoro. Me descubro. No descansar de mí sino encontrarme. Cada día recibo un regalo diferente. Alrededor de ellos conformo lo que soy.

CONECTAR CON LA ESENCIA DE LAS COSAS

Todo es mucho más sencillo. Apreciar cada momento de la vida. Ser la vida. Abordar el corazón de lo pequeño. Conquistar el mundo paso a paso

SER EL SENTIDO DE TODO LO QUE EXISTE

No es tan importante la vida que tengo como lo que elijo hacer con ella. No buscar el sentido de todas las cosas sino trabajar para que todas ellas encuentren su sentido.

AMAR ES TODO CUANTO NECESITO 

Amar y ser amado. Besar y ser besado. No esperar ser comprendido por completo. Aceptarme tal y como soy.

VIAJAR PARA SABER ADONDE PERTENEZCO

El 90% de lo que necesito está en mí, el resto suele estar muy cerca. Saber regresar y renunciar. Dejarle/lo ir para saber que es todo cuanto tienes. No ser propiedad sino propietario.

NO ESPERAR NI SER ESPERADO EN NINGÚN SITIO

«La perfección es una muerte lenta». Al final todos improvisan. Relajarme y disfrutar. Esto está ocurriendo aquí y ahora.

SER SINCERO CONMIGO MISMO

Conocer la larga colección de mis defectos para no responsabilizar de ellos a otros. Conocer también mis grandes virtudes para no verlas antes en los demás que en mí mismo.

ADQUIRIR COMPROMISOS Y CUMPLIRLOS

Tomar decisiones que me hagan feliz a mí y a aquellos que me quieren. Cuidar de mí y de los otros. Cuidar de mí a partir de otros. Cuidar de otros a partir de mí.

CAMINAR SOBRE EL VÉRTICE ENTRE LO QUE QUIERO, LO QUE PUEDO Y LO QUE DEBO SER

No perder de vista el vértice. Se mueve. Cambia de sitio a cada paso.

NO HABLAR NUNCA DEMASIADO

Escuchar. Saber parar y detenerme. No contener a otros. Invitar y regalar. Dar y recibir. Disfrutar del exceso para apreciar el foco.

PERMITIRME FLUIR

Llorar si necesito hacerlo. Reír si necesito hacerlo. Decir «Te quiero» si lo siento. Decir «Eres un estúpido» si lo pienso. Porque siento, luego existo.

Hace unos meses comencé a escribir una serie de artículos en el marco de la colaboración con Telefónica y su blog Contunegocio. En ellos hablo de la importancia que para mí está teniendo el primero de los 10 puntos que acabo de exponer. Mucho antes que la gran mayoría de datos, conocimientos y teorías que he aprendido en 5 universidades y en 30 años de educación, hoy valoro y aprecio la importancia de mi primer beso, de un día de lluvia y un día soleado, de una cena junto a alguien especial que está lleno de amor, respeto y confianza. Ningún sistema puede competir con esto. Ninguno.

«Cualquier sistema que construyáis será derribado» Leonard Cohen (Gracias Guille Dorronsoro por tu post Lo que mueve el mundo. Eres un grande)

Nunca deja de pasar

Nunca deja de pasar

hopeless-wanderer«La tierra está repleta de cielos, y cada arbusto común arde con Dios. Y sólo el que ve se quita los zapatos; el resto permanece sentado alrededor y coge moras»

Elizabeth Barrett Browning

«Lo más poderoso de un mensaje no está en sus palabras, sino en el corazón que en ellas late y les da vida.»

«El trato que le das a la oscuridad que habita en ti, define si seguirás siendo su esclavo al combatirla o si te transformarás integrándola.»

Andrés Ubierna

Fluyo. Es todo cuanto soy y cuanto siento.

La vida ocurre constantemente. De hecho nunca deja de pasar. Es aquí y ahora porque todo cuanto has hecho o harás alcanza un auténtico sentido solo en este justo instante. Puede que jamás hayas reparado en ello pero algún día te detendrás y apreciarás lo que te rodea. La belleza no es tanto lo que es como lo que ves. No es tan importante lo que aparentemente existe como lo que tú haces que exista, aquello a lo que das sentido con tus actos. Solo por eso nunca puedes ver más de lo que eres. El anciano desengañado y quejica que siempre protesta por el mundo o el niño que sonríe a la vida por defecto, ambos ven realidades diferentes. La persona que no expone sus preocupaciones y las carga como una pesada losa sobre su espalda y la persona que comparte lo que ve y lo que siente habitan igualmente en planetas diferentes. Sin embargo hemos aceptado que la realidad es una sola y que nosotros solo consumimos esa realidad. La vida como la mayoría de la gente la entiende tiene el aspecto de un supermercado al que acudes para comprar productos prefabricados por los que en algún momento pagas. Pero el hecho es que nosotros determinamos lo que es la vida. Tú eres el sentido de la vida. No hay un supermercado de la vida donde acudir a abastecerse de lo que nos dan. Más bien somos nosotros los que cultivamos y nos regalamos nuestra vida. Y ningún cultivo crece sin cosecha.

Vivir exige disciplina y esfuerzo, trabajo y enormes dosis de atención. Una gran cantidad de injerencias e interrupciones secundarias se interponen en tu vida. Tu trabajo es controlar la importancia que estos sentimientos, emociones, hechos o juicios tienen en tu vida y si realmente te aportan o no algo interesante y constructivo. La experiencia de flujo de la que habló en sus estudios Mihalyi Csikszentmihalyi es un estado en el que alcanzamos la felicidad gracias a que focalizamos toda nuestra atención y energía en disfrutar y aprender de lo que está ocurriendo ahora. Cuando eso ocurre somos capaces de experimentar de forma extraordinariamente diferente y rica incluso magnitudes básicas como el tiempo. Una persona que fluye suele tener en cada momento unas metas claras y también conciencia de lo que está viviendo, degusta por ejemplo lo que come, disfruta de las conversaciones, adquiere control placentero sobre lo que vive, interioriza el movimiento y aprecia todos sus sentidos. Csikszentmihalyi lo expresa de un modo sencillo: «Cuando la experiencia es intrínsecamente gratificante la vida está justificada en su presente, en vez de ser el rehén de un hipotético beneficio futuro» O también de un fracaso o éxito pasado.

Hay muchas personas para las que vivir no es suficiente. Las personas que no se conforman con SU VIDA  e intentan alcanzar una vida más equilibrada y feliz a menudo suelen cultivar la suficiente energía como para alcanzarla si acompañan esta energía de instrumentos y modelos de desarrollo adecuados. Las personas que no se conforman con LA VIDA, jamás tendrán energía suficiente para conocer otra realidad. Porque vivir es lo único que tenemos y si no entendemos la vida como nuestra más profunda y responsable elección de ser, solo podemos abandonarnos a lo otro o a los otros. Los primeros logran a menudo ser felices y superar retos aparentemente imposibles, mejoran también las sociedades y a las personas que las habitan. Lo hacen porque basan su cambio en si mismos y no en factores o condicionantes ajenos. Trascienden así la mayor parte de barreras y excusas que fabricamos a diario. Los segundos se frustran cada día buscando una explicación del mundo sin llegar jamás a encontrar una completamente adecuada o perfecta. Estos últimos transitan un camino de de frustración constante porque la vida que viven acaba dependiendo de una larga lista de factores en las que el último factor determinante suelen ser ellos mismos. La gran diferencia radica en que el cambio de los primeros parte del hecho de que aceptan que la vida es su vida y ellos la crean y la toman cada día para vivirla; mientras que los segundos viven continuamente pensando que la vida es para comprenderla y que les ha sido dada para consumirla. A diario me encuentro con que los primeros son exitosos agricultores de un campo de felicidad labrado a base de responsabilidad y conciencia; y los segundos son espectadores inactivos de una vida a la que a menudo visitan no sin miedo y repletos de prejuicios.

Para vivir no hace falta entrada. Pasa y sírvete.

Mi socio Javier, filósofo de la ciencia, tiene un colgante con una inscripción que siempre lleva en su cuello. Javier es un tipo que controla con fruición innumerables teorías acerca de todo lo existente y parece que se ha obligado a intentar recordar que la teoría es la herramienta más útil para tranquilizar, desarrollar y ejercitar la mente pero que la práctica es la base de cualquier tipo de progreso. La inscripción es una cita latina que dice lo siguiente: PRIMUM VIVERE DEINDE PHILOSOPHARE (Primero vive, luego filosofa)

Muchas personas con las que hablo encontrarían su refugio de paz si aceptasen simplemente que están vivos, si desechasen el ruido que les rodea y se centrasen en vivir aquí y ahora, con la total intensidad de disfrutar cada momento. Sin embargo resulta complicado bajar del coche. Echar el freno por un instante y comprender que simplemente estás ahí y es todo cuanto eres y tienes. A la mayor parte de personas les ayuda a bajar del coche y cuestionarse la realidad, el hecho de encontrarse en un insoportable atasco. Al igual que en las autopistas, la mayor parte de vidas también tiene momentos de tráfico o de circulación fluida. Y cuando llegamos a un enorme atasco y sabemos que no podemos salir, primero abrimos temerosos las ventanillas para atrevernos a respirar un aire diferente al aire acondicionado del coche, luego abrimos la puerta y echamos un vistazo para ver qué ocurre fuera y si es o no seguro salir, y por último a veces -solo a veces- salimos del coche y disfrutamos de la vida. Todo esto se repite desde hace miles de años y nunca deja de pasar.

Noche escandalosamente divertida tras una semana de intenso ejercicio sobre tierra. Soy inmensamente rico en mi pobreza. Acariciarte es estar vivo.

Reflexiones entorno a mi red

Reflexiones entorno a mi red

redDebido a que la forma de trabajo de la iniciativa pretende basarse en el aprovechamiento de la red, quiero hacer públicos algunos datos e información sobre la que aún sigue siendo «MI» red y que -tal y como le comenté a Odilas hace meses- espero que en dos años sea la red de todos. El siguiente informe habla de lo que soy porque detalla lo que hago. Lo he dividido en varias áreas y he intentado ser lo más estricto posible sin violar mi intimidad.

En un mundo completamente saturado de información y conocimiento generado, en un 80% de los casos redundante, algunas herramientas nos ayudan a entender mejor nuestra actividad en las redes. Dedicamos mucho tiempo a ellas y surgen proyectos que nos ayudan a visualizar nuestras redes de relaciones 2.0. Empezaremos sin embargo hablando de las relaciones 1.0 que integran en estos momentos la iniciativa

RELACIONES SÍNCRONAS (realtime)

Como sabéis el año pasado mantuve personalmente conversaciones de al menos una hora con alrededor de 320 nuevas personas en diferentes partes del planeta tanto a nivel presencial (cafeterías, casas, foros, conferencias, encuentros, proyectos) como a nivel de videoconferencia (skype, hangout y otros). En el último repaso de contactos directos de alto nivel (perfil elevado, respetables, serios, gran experiencia, visión, capacidades técnicas y mentalidad transformativa) he cribado al menos 140 personas que se identifican de forma directa con el reto de la iniciativa y que han formado o pueden formar parte de futuros proyectos, convivencias, foros, etc… Esto significa que de la red de 1000 personas con las que suelo mantener algún tipo de vínculo (por redes, blogs, colegueos), solo considero que 140 serían efectivas. En otras palabras, estas son las personas por las que puedo responder y confiar dentro de mi red. En los últimos meses, a medida que mi actividad ha ido tomando forma gracias a otras marcas con las que colaboro, he interiorizado que la fiabilidad se mide con el tiempo y también que cada persona tiene su momento por lo que es complicado coincidir. He detectado además un fenómeno que otros compañeros han detectado antes: la falta de claridad de muchas personas a la hora de determinar su grado de compromiso. En general no sabemos decir que NO cuando no podemos o queremos hacer algo. En mi caso, cada vez creo que lo hago mejor. Aprendo a base de guantazos así que soy un superviviente continuo del ostiazo thinking inherente a todo remero que intenta abrir nuevas oportunidades de negocio;)

Por terminar este apartado, diré que 2012 ha sido sin duda el mejor de mis años a nivel profesional y que las relaciones que he establecido por medio de conversaciones han sido altamente enriquecedoras. Considero que muchas de las personas con las que he hablado tienen un compromiso más que real y sincero con aquello que intento levantar. El balance, pues, es muy positivo aunque como crítica necesaria añado que me gustaría poder levantar más proyectos compartidos con las marcas y personas que integran la iniciativa. Aunque he ejecutado proyectos como iniciativa durante este año y medio de andadura, no he logrado que supongan la mayor parte de actividad profesional. Y sin duda, esa no era la idea. Aunque comos sabemos, todo evoluciona por sí mismo y con el tiempo 😉

CORREO ELECTRÓNICO

Inmersion, una nueva herramienta desarrollada por el MIT me ha hecho reflexionar sobre el impacto del envío de correos en la red de personas que conozco (personal/profesional, se diluyen ambas). A menudo suelo utilizar herramientas para la medición de métricas que me ayuden a dibujar mi tejido relacional en lo electrónico sobre la arena. Suelo analizar las cuatro redes sociales en las que estoy presente con resultados algo contradictorios que más tarde compartiré. Sin embargo Inmersion me ha permitido dibujar nuestro mapa relacional a partir de una herramienta que suelo emplear a diario y cuyas métricas hasta hoy me resultaban completamente desconocidas. Los dos gráficos que acompañan este artículo corresponden a un análisis cualitativo de los destinatarios de mis correos electrónicos y la frecuencia de envío de correos en mis cuentas personal y profesional. He deducido que aquellas personas a las que solamente he mandado de 1 a 10 correos no aparecen representadas debido a que suponen una muy reducida muestra respecto al global analizado sobre los más de 62.000 correos de los últimos 3,5 años de mi vida.

La visualización de esta información me ha resultado especialmente útil para aprender sobre los siguientes elementos:

  • He interiorizado algunas desconexiones evidentes entre grupos y equipos con los que me he relacionado/trabajado en estos años de cuyo aislamiento no era consciente. Uno de ellos me ha sorprendido por su endogamia absoluta. Se trata del grupo de personas del equipo MINN cuya proyección relacional -en mi realidad- está aún por descubrir. Se trata de la pequeña red de círculos morados que se encuentran en la parte superior derecha del mapa de mi cuenta de correo profesional.
  • Del mismo modo me has sorprendido el grado de aislamiento en la comunicación de algunos nodos individuales (personas) a la hora de comunicarnos. En este sentido, he visualizado que un gran número de personas de mi red solo tienen relación o contacto conmigo. Algo que probablemente sería aún más evidente si el grado de representación fuera más minucioso.
  • He entendido el peso de cada grupo a nivel cuantitativo en mi actividad diaria. Por ejemplo, los grandes círculos verdes (personal) y rojos (profesional) corresponden a una lista de correo frecuente de 12 amigos en la que nos mantenemos informados. Sinceramente, que mis amigos tengan más peso que mis actividades profesionales me ha tranquilizado.
  • Me he dado cuenta de la enorme reducción progresiva de correos tanto enviados como recibidos durante los últimos 5 años. Increíble el descenso durante este año 2013 que de veras me alegra. Creo que es una buena noticia porque el correo no me ha parecido nunca una herramienta de trabajo productiva y esto implica que ha pasado de ser una herramienta de comunicación usual a una herramienta para envío puntual de información estructurada.
  • He podido corroborar que durante 2012, un año extremadamente agitado para mí en el que no he parado un solo minuto de viajar, aprender y trabajar, mi red de contactos de confianza se ha ampliado en una proporción de 4 a 1 respecto a cada uno de los años anteriores (2009, 2010, 2011) Coincide con un año entero dedicado a intentar que el negocio despegue.

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Fig.1 – cuenta de correo personal

 Algunas conclusiones pueden ser las siguientes:

  1. Mi red de contactos, como me temía y no para de comentar, es totalmente centraliza si bien he comunicado a través de esta herramienta (el correo electrónico) a muchas de estas personas/grupos entre sí para intentar distribuir la red.
  2. En segundo lugar, en el mapa -como es lógico- no aparecen representados aquellos contactos personales/profesionales con los que jamás me comunico por correo y con los que empleo herramientas de mensajería instantánea (whatsapp, gtalk y otros), videoconferencias (hangouts y skypes) o bien encuentros físicos a los que durante el último año y medio he intentado dar un mayor peso. A lo que me refiero es que aunque la foto no cuenta con todos estos datos, puede ser una foto muy aproximada de mi realidad.
  3. En tercer lugar, ambos mapas reflejan de una forma muy evidente que existen conexiones a veces débiles a veces sólidas, entre muchas de las personas con las que me relaciono y que sin embargo en el caso de otras no hemos logrado trascender una relación persona-persona y explorar o conectar con otros ámbitos o grupos de personas en mi vida.
  4. En cuarto lugar el uso a menudo indistinto que hago de mis cuentas de correo no favorece un análisis mucho más exhaustivo y fiable de las relaciones de comunicación que establezco en mi vida y en mi trabajo, pese a que ya sabéis que no distingo entre ambos ámbitos debido al modelo de vida por el que actualmente apuesto.
  5. En quinto lugar mi actividad por correo ha descendido de una forma drástica, mucho más centrado ahora en la efectividad de generar contactos presenciales y he perdido relación con algunas personas con las que solo hablaba por correo (el CÓMO) probablemente debido a que estoy muy enfocado a generar relaciones eminentemente útiles y prácticas que mantengan el POR QUÉ de mi vida (trabajo, relaciones,…) que tengo ahora mucho más claro que antes 😉

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Fig-2 – cuenta de correo profesional

REDES SOCIALES:

Para analizar linkedin lo más inmediato es usar su herramienta INLABS, que nunca había utilizado pero que no me ha aportado mucho porque no pondera el peso de los contactos ni la procedencia en gran medida debido a mi natural falta de dedicación a organizar mis nuevos contactos. De entre las más de 1000 personas, no he logrado por tanto establecer nexos de los que pueda sacar conclusiones. Y aunque una vez dentro de linkedin me proclaman como eminencia, con sinceridad creo estar lejos de estar explotando al máximo esta herramienta.

Para analizar twitter, red por la que siempre he apostado por sus características de inmediatez y flexibilidad, utilizo herramientas algunas de ellas algo polémicas como Klout o Kred y otras contrastadas como SocialBro. En Septiembre de 2012 se produce un punto de inflexión entre contactos reales (bidireccionales) y seguidos/seguidores (unidireccionales) con una fuerte tendencia a la consolidación en los primeros durante todo este último año. Todo ello sin que se perciba en las estadísticas globales una disminución en la frecuencia, cantidad y goteo de los tuits. Una comunidad de 1900 personas integran mi cuenta. Un 73,5% de la gente con la que mantengo contacto hablan castellano, un 24% habla exclusivamente inglés, y el resto alemán, italiano, portugués pero mayoritariamente en esa minoría o grupo mixto un 1% habla francés. La mitad de las personas que están en mi cuenta viven en la Comunidad de Madrid, el resto sorprendentemente se reparte entre una gran cantidad de nórdicos (un 10%), griegos (un 5%), argentinos, chilenos, norteamericanos (canadienses y estadounidenses),…. El 99% de ellos tiene un grado elevado de complejidad en su perfil. Esto era de esperar porque suelo seleccionar y dedicar tiempo a investigar a las personas en esta red. Por otro lado una gran cantidad de followers a su vez tienen un elevado número de followers. Desconozco si el dato es positivo o negativo empíricamente pero parece buen germen para el crecimiento y la calidad de «MI» red hacia una red distribuida. No quiero compartir sin embargo datos concretos sobre influencia del perfil porque sabemos que existen grandes críticas sobre este tipo de métricas subjetivas pero sí comentaré que parece un posicionamiento digno y reconocido. Algo que agradezco de antemano.

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Fig.3 – Mapa de contactos Linkedin

A nivel de confluencia, he advertido con estas y otras herramientas que hay muchos contactos directos que lo son paralelamente en diferentes redes y es algo que me alegra porque afianza vínculos. Respecto a la visibilidad, tengo la suerte de contar con no pocas menciones y referencias a lo largo de las semanas en parte derivado de que aunque no suelo compartir detalles concretos de mi actividad profesional, sí comparto la mayoría de reflexiones o investigaciones en las que estoy metido de lleno día y noche. Sobre todo en materia -por este orden- de VIDA, EQUIPOS, INNOVACIÓN, ACOMPAÑAMIENTO, CONSULTORÍA, LIDERAZGO.

Por concluir, diría que si esto fuera una radiografía de la red, y teniendo en cuenta que solo lleva año y medio en marcha, con todos los reveses y adversidades, alegrías y triunfos del camino, el diagnóstico es que la RED DE LA INICIATIVA ESTÁ ESTABLE Y EVOLUCIONA FAVORABLEMENTE. Como sabéis, esto no es muy positivo pero tampoco excesivamente negativo. Simplemente significa que podría estar mucho mejor, que queda muchiiiiiiiiiiisimo por hacer pero que el progreso de la marca y del mensaje está siendo satisfactorio dentro de la gravedad que aparentemente nos rodean. Mi intención es continuar explotando la idea de «cero estructura» y mantener en standby esta red para que sea un canal de relación entre profesionales independientes y agentes de cambio y un escaparate útil para organizaciones. Con este informe muy epidérmico solo quería ser transparente con vosotros. Me hubiera gustado decir que esta es una red distribuida y autónoma pero me gusta más aún ser consciente del momento en el que está y también de lo que soy.

NOTA: En otras entradas a lo largo de estos meses podéis comprobar informes similares algunos de los cuales hablan de detalles de actividad de la iniciativa. Para más información sobre oportunidades de colaboración o proyectos, poneos en contacto conmigo a través de los medios que ofrece esta web, amig@s.

Suerte y sueño.

 

imbatibles

imbatibles

undefeated4Tremendo largometraje documental premiado por la Academia hace ahora dos años que no había tenido ocasión de ver hasta el momento. Undefeated (Lindsay & Martin, 2011)  es una de esas historias de superación y trabajo duro de equipo que combinan de forma magistral el lenguaje visual y la narración en primera persona, aportando un haz de luz sobre la importancia del equipo y la apasionante capacidad de trascender a cada uno de los miembros que lo forman.

La historia impacta por lo real e inmediato de los hechos. Debido a la naturaleza aparentemente improvisada de la narración, el espectador interioriza que lo ve ocurre a diario en cualquier parte del mundo pero a la vez se siente atrapado por la humanidad de los diálogos; la constancia, el sacrificio y el liderazgo ejemplar del entrenador y las continuas situaciones de aprendizaje que el espectador vive en modo POV (Point Of View) como si fuera la propia sombra del entrenador.

El film también convence por el propio argumento y contenido. Los Manassas Tigers son un equipo mediocre integrado por jugadores de los barrios marginales de Memphis hasta que el entrenador Bill Courtney irrumpe en sus vidas. Seis años de trabajo conjunto con las familias y los profesores del instituto, formando día a día la cantera y educando a los chicos en la importancia del equipo, los valores en la vida y la necesidad de superar su orgullo personal, obtienen increíbles resultados hasta llevarles a los play-off del estado tras lograr superar la liga regular de las escuelas secundarias. Lo realmente magnífico de este documental, aparte de un final que espero que podáis disfrutar, es que el propio guión del documental -grabado íntegramente siguiendo los pasos del equipo- está supervisado por el propio entrenador y dos de los jugadores a los que se coge especial cariño durante la película: O.C. y Money Brown que junto con el extraordinario crecimiento personal que logra Chavis representan el eje del equipo. Recomiendo ver la película por muchos motivos, pero uno de ellos es porque consigue relatar de forma natural la importancia de esta frase que continuamente repite el entrenador Courtney: «El carácter de una persona no se mide por la cantidad de veces que gana sino por cómo puede aprender después de sus derrotas» Otro buen recurso de aprendizaje para equipos y sin duda una película imprescindible para cualquier profesión de acompañamiento.

Lo es

Lo es

IMG_20130513_081015«Nuestro mayor miedo, no es que no encajemos. Nuestro mayor miedo es que tenemos una fuerza desmesurada. Es nuestra luz y no nuestra oscuridad lo que más nos asusta. Empequeñecerse no ayuda al mundo, no hay nadie inteligente en encojerse para que otros no se sientan inseguros a tu alrededor. Todos deberíamos brillar como hacen los niños. No es cosa de unos pocos, sino de todos. Y al dejar brillar nuestra propia luz, insconcientemente damos permiso a otros para hacer lo mismo. Al liberarnos de nuestro propio miedo, nuestra presencia libera automaticamente a otros«

Marianne Williamson

Hace poco el actor Will Smith compartía que la mayor parte de veces él ve que las personas de su entorno no se atreven a ser felices o a disfrutar de lo que ocurre porque se convencen de que «no puede ser tan sencillo» o «no puede ser tan fácil» y que esto le consume muchas veces. Sobre todo porque casi todo el tiempo, simplemente LO ES. No hace falta mayor complejidad o esfuerzo, simplemente es así y debes contemplarlo o disfrutarlo tal y como es u ocurre. Él recordaba una frase de Confucio que dice que tanto las personas que piensan que pueden hacer algo como las que piensan que no pueden hacerlo, ambas tienen razón. Lo cierto es que te han dado una vida -la tuya- y tu vida solo será lo que tú hagas de ella. Más allá de esto, está el vacío o aquello que no puedes decidir.

Hay algo que siempre he logrado y que procuro recordar en momentos de tristeza o de gran dificultad. Lo hago porque es uno de mis mayores logros y lo empleo como elemento de fuerza para continuar luchando. De alguna manera este logro ha logrado sobrevivir a mis numerosos defectos hasta hoy. Existen complejos modelos para medir las relaciones entre personas y cualquier profesional del acompañamiento conoce la mayoría de ellos. Sin embargo a mí me gusta pensar que el éxito en las relaciones está basado en algo tan sencillo como esto: Que aquella persona que se acerque a hablar contigo, al final de la conversación se vaya mejor de lo que vino. Simplemente eso. He de decir sin ánimo de parecer un pretencioso, que suelo lograr que esto ocurra en un alto porcentaje de ocasiones. A veces esto ocurre a medio y largo plazo, después de varias conversaciones, pero finalmente suele ocurrir. Creo que se debe a que presto atención a la persona y a aquello que desea compartir.

Hace algunos años realicé un descubrimiento en mi entorno más cercano. Desde entonces lo repito con frecuencia y lo he interiorizado una y otra vez. Empecé a tratar a algunas personas no como lo que son sino como lo que ellos desean ser. Pensándolo, existen una serie de ritos de paso muy sencillos que he detectado y que pueden ser los siguientes:

  • VISUALIZAR: En un primer momento pregunto de forma discreta a las personas qué quieren ser. De este modo logro dos objetivos: conocer aquello que quieren ser y que las personas lo verbalizen y de algún modo sean conscientes de ello al pensarlo en alto. Utilizo para ello diferentes estrategias de la forma más natural posible. Lo hago siempre en entornos distendidos donde vivir el AQUÍ y el AHORA sea realmente posible para ambos. La mayor parte de personas al compartir aquello que quieren ser suelen acabar diciendo frases de este tipo:  «pero no es tan sencillo», «pero no pude hacerlo» o «pero al final tuve que ser o hacer esto». Y al decirlo sus ojos suelen estar completamente convencidos de ello. Es el turno entonces del siguiente paso.
  • SERVIR: En el siguiente paso comienzo poco a poco a tratar a esa persona como si ya fuera eso que quiere ser. Insisto entonces en crear la realidad o el clima necesarios para que esa persona pueda ser aquello que ha compartido. He comprobado que tratar a alguien creyendo con certeza que es aquello que quiere ser y comportándote en consecuencia, genera seguridad y reconocimiento, construye confianza. De modo que sorprendentemente, y apenas sin notarlo, tras media hora la persona suele abandonar por un instante su temor a ser aquello que quiere ser. Creo que lo hace porque ve que otra persona -al menos una en el mundo- ve en ella lo que realmente quiere ser y no lo que considera que está obligada a ser. Es una mezcla de liberación y responsabilidad que suele provocar sonrisas y despertar emociones escondidas. Cuando esto paso, suele ocurrir algo aún más sorprendente. Durante el tiempo que dura la conversación esa persona se siente única, se focaliza en ser aquello que quiere ser y de algún modo se convence de que al comportarse tal y como siempre quiso comportarse, ya es aquella persona que quería ser. Es como si ese «pero no es tan sencillo» se transformase de repente en un «lo es». Todavía no es consciente de ello pero nota que algo está pasando. Hay un conflicto y no sabe manejarlo, se siente expuesta y frágil. Sin embargo continúa compartiendo porque el tampoco siente un riesgo muy elevado en apariencia. Es como si el hecho de adoptar inconscientemente la actitud y el comportamiento de quien siempre quiso ser, automáticamente le estuviera convirtiendo en la persona que quiere ser. Es algo así como una redención propia que le permite conocerse de otro modo. En este momento la persona suele actor de lo que está ocurriendo, siente poder sobre lo que pasa y a menudo vértigo. Yo también suelo sentirlo. Realmente acojona por la aparente falta de control. No sabría expresarlo de otro modo, pero en esos momentos siento que el miedo y la luz se expanden por contagio.
  • INSISTIR: Por último, siempre de forma sincera y solo si realmente lo pienso y lo creo, suelo compartir con la otra persona que no conocía esa cara B de ella y que me ha encantado conocerla o bien que he disfrutado o he aprendido mucho de lo que hemos hablado. Lo hago para devolver el valor que me ha aportado y en cierto sentido como agradecimiento o reconocimiento por el esfuerzo. A pesar de esto por lo general al final de la conversación, la otra persona suele decir «ojalá el mundo fuera así» o bien «ojalá en mi oficina pudiera ser así» o también «no puedo comportarme así siempre que quiero«. En un primer momento todas estas frases de cierre pueden parecer tristes y desesperanzadoras. Pero yo no lo veo de este modo. Hemos sido educados en la proyección de responsabilidad sobre otros y en el victimismo y no podemos pretender que nadie se haga responsable de aquello que quiere ser en media hora. Por ello mi visión suele ser muy optimista. Tras todo este trabajo natural y distendido hay varias realidades objetivas cada una de las cuales creo que es un logro colosal por sí misma: a) La persona sabe que puede ser aquello que quiere ser o quien quiere ser, lo ha vivido por un momento y se va sabiendo que es posible; b) La persona se siente comprendida y respetada actuando tal y como quiere ser, lo que ayuda sin duda a un segundo intento y a superarse en un futuro; c) La persona se ha sentido bien en este rol y ve que puede ser de alguna utilidad inmediata (en sus relaciones, para conocerse, para su tranquilidad), d) Yo he participado en que esa persona se sienta bien, lo que también me hace sentir bien (con esa persona, conmigo, con lo que hago); e) En un futuro, esa persona querrá comportarse conmigo tal y como quiere ser aportando una gran riqueza a nuestra relación; f) Los dos nos acabaremos conociendo realmente tal y como queremos ser sin ningún tipo de aditivo o restricción alrededor de lo que somos. Todo esto puede ser bueno o malo según lo que creamos en cada momento, pero lo que es indudable es que habremos logrado algo real y auténtico, el comienzo de una relación sincera.

Nunca había pensado que hacía esto pero de algún modo lo hago constantemente. Creo que mis relaciones personas y profesionales son ricas en este sentido pero antes de acabar el artículo quiero confesar algo. No realizo este ejercicio con todo el mundo, tan solo con aquellas personas que se sienten cómodas o deciden que es el momento de compartir algo de forma abierta. Si así ocurre, entonces intento tan solo seguir la vía que la persona abre, como diría mi amiga alpinista Cecilia Buil. Creo que es muy contraproducente en general tomar decisiones por otros. En este caso más aún. No se trata tanto de pedir permiso a la persona como de detectar cuándo es el momento adecuado para no pedir permiso y actuar. Y en esto, como en todo, la experiencia es un grado.

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