por David Criado | Ene 1, 2013 | CREATIVIDAD e INNOVACIÓN

Ser o no ser… bueno, esa es la cuestión
El otro día alguien me dijo que consideraba que yo era una buena persona. Me quedé perplejo. Rápidamente encontré una explicación lógica que pudiera justificar esa opinión. En mi caso, de ser cierto, no creo que tenga ningún mérito por tres simples motivos que compartí en ese momento:
- Puede deberse a mi lamentable falta de memoria en todos los sentidos. No tener memoria casi en absoluto obliga a cultivar una serie de valores que se encuentran en franca decadencia y que, bien mirados, en estos momentos resultan diferenciales. Cuando antes encendíamos nuestro ordenador SPECTRUM nadie esperaba que aquello fuese como una bala, sino que simplemente funcionase. La paciencia se daba por supuesta y nadie esperaba que toda la biblioteca de su casa fuese a caber en un disco extraíble de 5 1/4. Nuestro nivel de expectativas respecto a un SPECTRUM era mucho más saludable de lo que sin duda lo es ahora respecto a cualquier computadora. No esperábamos más de lo que nos podía dar. Y eramos felices. Desde entonces como una recurrente lección diaria, cada mañana nos hemos educado en la velocidad hasta que el tiempo de respuesta es a menudo más valorado que la calidad de la respuesta. Ahora parece que tener paciencia es para los pobres. Si tienes dinero no hace falta tenerla en absoluto. Algo parecido ocurre conmigo. Debido a mi incapacidad latente por almacenar recuerdos, soy igualmente incapaz de tener los recursos suficientes para actuar con una maldad medianamente estructurada. Luego no soy bueno, es que si fuera malo lo sería de bajo rendimiento. Y claro a mí me educaron en la competitividad, y para no ser verdaderamente muy malo, mejor no serlo en absoluto. Es mi consejo.
- El segundo motivo es que puede deberse a mi enconado afán de rebeldía y análisis continuo. Soy -ya lo he dicho- un salmón. Me refiero a que probablemente pese en mí en mayor medida un espíritu rebelde (que me obliga a ser, hacer y decir lo contrario de lo que la gente es, hace o dice) que un espíritu bondadoso. En este sentido si el mundo fuera un lugar perfecto en el que todo el mundo es por naturaleza respetuoso, entrañable y constructivo con el resto, casi con total seguridad yo sería un terrorista fanático y barbudo de los altos del Golán. Si no lo soy es que serlo ahora mismo no resulta nada original. Chavales, lo outsider, trendy y fashion hoy en día es ser buena persona. Piensen en banqueros, presidentes pusilánimes, cacos de poca monta, corredores de bolsa, descorazonados especuladores, piensen en esos diminutos déspotas de despacho que socialmente cambiaron las plantaciones de Louisiana y la lucha contra la emancipación por las software factory, el offshoring y la lucha contra la dignidad humana. Todo eso lo hay a patadas, hasta debajo de las piedras. Es difícil encontrar valor en ser más de lo mismo. Esa mentalidad secesionista sinceramente me agota, quiero decir que es lo de siempre, que ya lo hemos visto mucho. Y creo que por eso tal vez yo intente hacer precisamente todo lo contrario. Puede que sea esto también.
- El tercer motivo tiene que ver con que ser malo hoy en día no resulta nada complicado. Si ustedes hoy tuvieran un momento propio, intenten ser malos con la persona que ahora mismo está a su lado. Comprobarán que no existen más que facilidades para serlo. De hecho en cada telediario y periódico, en cada información que nos llega por las redes comprobamos la gran cantidad de personas que logran ser malas a diario con total impunidad. Personas que insultan, que golpean, que no paran en los pasos de cebra, no ayudan a los ancianos o que le dedican una gran cantidad de tiempo a ver cómo ser menos malo que otro pero que nunca renuncian a dejar de serlo por completo. Lo hacen -como la mayoría de vilezas de la especie humana- por si acaso. Dicho de otro modo, a priori -sin ir más allá de condicionantes añadidos- joder a otro es más fácil que cuidarlo. Además de esto los que son malos de alto rendimiento por lo común se salen con la suya. Por contra dediquen el mismo tiempo a intentar ser buenos con la persona que ahora mismo está a su lado. A un nivel primario (regalar una flor, abrazar, compartir la comida o mostrar interés) puede resultar sencillo. Ahora bien, intenten ser buenos de alto rendimiento. Intenten por ejemplo levantar un negocio no pensando solo en uno mismo sino en el bienestar de los demás. Intenten por ejemplo cumplir con la legalidad vigente en un contexto social en el que lo que se valora es el pillaje. Intenten darlo todo de sí mismos por un bien común, cualquiera que este sea. No tardarán en encontrarse con tremendas barreras, soledad, rechazo, prejuicios y un castigo voraz por parte de aquellos que se instalan en la sencillez de seguir jodiendo a otros. Porque ser bueno es complicado. Y a mí es un reto que me parece sinceramente más apasionante. Tal vez solo sea eso.
Lo que quiero decirles es que ninguno de los anteriores tres motivos es digno de admiración. Se trata por el contrario de ser práctico. Ante mi incapacidad, mi aparente pasión por la autonomía, mi búsqueda insensata de la superación y mi naturaleza díscola, ser malo o malo de remate no sería muy inteligente o útil.
Hace tiempo en un libro que escribí compartí un pensamiento en el que sigo creyendo firmemente: «Las buenas personas no caben en las grandes ciudades» Desde hace muchos años no diseñamos ni construimos las ciudades para que quepa gente interesante. Una ciudad está pensada por defecto para que viva gente cotidiana, anodina, sin aparente ambición moral y con una nula sensibilidad por llamar la atención sobre los otros. Esto es sencillamente así aunque para mí resulte un modo de vida incomprensible. Por otro lado el concepto de bondad para mí es similar al de interés y no es relativo o subjetivo. Quiero decir que en lo que poco que he viajado en todos los países y culturas la bondad se reconoce a los ojos de todos los mortales y que además lleva implícita unos valores comunes que sería bueno rescatar a diario.
A los que me encuentro a diario que son interesantes, los considero una especie en extinción que debería habitar en complejos residenciales protegidos donde el resto del público vil y abyecto pudiera observarles a través de algún cristal, sin necesidad de mucha interacción debido al riesgo de contagio. En el caso del contagio a espectadores, habría por supuesto que inventar algún tipo de vacuna contra la originalidad, algo que se tomara rápido en situaciones de emergencia. Tal vez un sobre de aburrimiento efervescente siempre presente en el bolso de cualquier mujer de hoy. O puede que para los jóvenes una pastilla de moderación en dos colores que les ayudara a ser lo que otros creen que fueron. O seguramente una de esas pastillas para no soñar que reclama Sabina en su canción. En el caso del contagio a gente interesante, yo tiraría de chocolate, que siempre me despierta una creativa vocación por lo prohibido.
Por último solo añadir que ser buena persona también puede parecer de pobres. Sobre todo a la vista de los recientes acontecimientos. Un amigo mantiene que no se puede ser rico y feliz pero que tampoco se puede ser pobre y no aspirar a la riqueza. Dice que vivimos en esa contradicción constante. Personalmente creo que en tiempos de carestía, ser pobre es muy cool, que dirían los pijos paradójicamente hoy en riesgo de exclusión social. Lo es aunque solo sea porque no quede más remedio. Feliz 2013 para todos.
por David Criado | Dic 26, 2012 | DESARROLLO DIRECTIVO
Cuando hablamos de dirección por objetivos, ¿Es posible que nuestro objetivo sea no tener ninguno o simplemente necesitar espacio y tiempo para poder buscarlo? Contradiciendo a Anibal Smith, el capitán del Equipo A, ¿Acaso puede ser parte de un plan no tener un plan? ¿Podemos vivir o trabajar no teniendo un plan completo y absoluto sino simplemente pequeñas coordenadas? Cuando el peso inmenso del mecanicismo y la inercia social generan burocracia hasta en tu propia vida, cuando todos los ejes deben estar continuamente en movimiento (conectados, a punto, aparentes) y sobre todo cuando sientes que ni siquiera te permites respirar ¿existe alguna alternativa respetable? Como diariamente leéis en este blog, desde la iniciativa creemos que desde luego que sí y que existen múltiples formatos exitosos (arte, lean, agile,…)
En la película The giant mechanical man (Kirk, 2012) asistimos al encuentro de dos personas que se niegan a tenerlo todo absolutamente claro. No es que rechacen la estabilidad sino que tienen una forma distinta de entender qué es una vida estable y cómo pueden ser felices. En esta magnífica historia estar perdido o sentirse invisible para el resto son tan solo los primeros pasos de un camino hacia un futuro donde sentirse apreciado y especial. Aparentemente en esta película ninguno de los protagonistas tiene trabajos «respetables» para la sociedad, pero la película no trata de eso. Trata de que por sí mismas estas dos personas son capaces de ennoblecer cada profesión que desempeñen. Respeto enormemente el potencial inmenso de generación de valor real de estas personas. No tienen planes de carrera definidos porque sencillamente no corren por las mismas calles que los atletas de negocio que todos conocemos. Se han conocido y han conversado, han aparcado el ritmo de sus vidas para alejarse de la autopista impuesta de la burocracia. Hablamos, sin duda, de otra dimensión.

Uno de mis blogs de referencia en management exponía hace poco de forma muy concisa las teorías a favor y en contra de la burocracia enunciadas respectivamente por Weber y Merton. Lo que resulta indudable es que a menudo los sistemas que creamos nos acaban devorando poco a poco hasta perder la perspectiva. Resulta complicado explicar a veces cómo aquello que creíamos indudable no lo es tanto. En la mayoría de teorías sobre el management, en muchos de los pensamientos que ahora damos por válidos, echo de menos un componente necesario de locura, de aparente caos impredecible y de gestión de lo incompleto. Porque aunque sabemos que en teoría «todo debería funcionar», también sabemos que casi nunca nada es perfecto o funciona por completo.
Cuando elaboramos un plan de negocio, cuando realizamos una previsión, cuando defendemos un discurso o nos posicionamos en una conversación, a menudo la base de nuestro sentido es la PERFECCIÓN. Pero es también nuestra mayor huida hacia delante. Porque nos han enseñado que 1 + 1 siempre daba 2, que si durante toda tu vida estudias y trabajas duro siempre tendrás el mejor de los posibles resultados. Nos lo han enseñado, sí, pero en este momento nadie en su sano juicio se atreve a defenderlo. Porque tenemos circunstancias y porque formamos parte de un sistema vivo (equilibrado e inestable, caótico y controlado) Cuando desde la iniciativa hablamos de modelos de abiertos, de la necesidad de trascender la masa (el número, el volúmen, la cantidad, la cifra), cuando exteriorizamos que es necesario personalizar cuando trabajamos con personas (¡siempre!) es frecuente encontrarnos con sistemas, con líderes y con organizaciones que perdieron la noción real del valor de las personas. Necesitamos hoy, cada vez más fuerte y diligentemente reconocer que no somos perfectos. Que tal vez reconocerlo sea lo perfecto. Necesitamos hablar dentro de las organizaciones y en nuestros equipos. La herramienta de transformación más poderosa que jamás he utilizado se llama CONVERSACIÓN. Porque el animal social que eres no lo es porque tengas una cuenta en facebook, foursquare, twitter, whatsapp, linkedin,… sino por relacionarte y desarrollar tu vida en tu contexto.
Hace algunos meses hablé del constante empeño de la gente por clasificarme en una caja en las que ellos se sientan cómodos, y de mi mayor empeño aún en desarrollar mis habilidades y aptitudes en una caja (o no) que yo decida. Esto tiene que ver con conceptos que son necesarios como medio para convivir pero que entendidos como fin último me resultan tremendamente insoportables. Sobre todo tres de ellos especialmente dañinos: «competencia técnica», «previsión» y «estándar». Todas las empresas de corte burocrático que he conocido se identifican siempre porque parten de un supuesto que incluye en su definición los anteriores tres conceptos: «El comportamiento de todos los miembros de una organización estándar, con sus correspondientes competencias técnicas y especialidades, es completamente previsible» Por eso la mayor parte de estas organizaciones promueve una cultura basada en tres pilares: planificar, planificar y planificar. Lo malo de estos tres pilares es que la proyección de una idea nunca será equiparable o útil sin una experimentación continua por medio de la acción.
Básicamente, hablando claro, si hemos llegado hasta aquí es porque hay mucha gente detrás que se ha equivocado. Mucha más, sin duda, que la gente que acabó acertando. Esto vale en cualquier ámbito de la vida pero más aún en nuestros entornos de trabajo. Aclaración básica: El miedo a la entropía, mata. Personalmente amo los sistemas, soy un completo fanático de ellos y creo que necesitamos sistemas, creo que lo somos y creo también que todo aquello que creamos (empresas, proyectos, ecosistemas) es por naturaleza y apriori algo vivo. Nuestro amigo Iñaki Velaz destacaba los cuatro elementos básicos de cualquier sistema: entradas (inputs), proceso (throughput), salidas (outputs) y el que sin duda más solemos descuidar retroalimentación (feedback). Esto se debe en mi opinión a que cada una de estas fases del ciclo de la vida de un sistema son progresivas pero a que es realmente complejo encontrar un sistema con un ciclo de vida realmente maduro. Los expertos lo llaman cadena de valor.
En mi propia vida, esto es aplicable a la metáfora del buen conversador: Todo el mundo sabe recibir alguna entrada (escuchar algo con un mínimo valor), muchos saben generar un proceso (pensar algo que responder), unos pocos saben concretar ese valor (hablar con propiedad) pero realmente muy pocos saben conversar (recibir y aportar feedback continuo). Realmente conozco a muy pocos buenos conversadores (aquellos que saben completar el ciclo) y a una gran cantidad de personas aceptables en una o dos de estas fases (buenos pensadores o personas que sepan escuchar o personas que sepan hablar) Pero realmente saber conversar y mantener un diálogo constructivo y eficaz está al alcance de muy pocos. Puede que sea lo que más admire y respete de una persona a la hora de determinar si es o no respetable. Desde la antigüedad los sabios han considerado el dominio y la práctica de la conversación como uno de los mayores grados de civilización posibles.
Personalmente opongo, por tanto, la actitud burocrática (impositiva, exclusiva, inflexible y teórica) a la actitud conversacional (democrática, inclusiva, flexible y práctica). Lo que para mí representa la burocracia tiene que ver con el artificio de las cosas. Lo que para mí representa la conversación tiene que ver con la naturaleza y el sentido común de las personas. No me cabe ningún duda: la conversación es la mayor y más tangible forma de rebeldía humana. Tenemos ejemplos de ello en la Historia y en la formación de todo tipo de regímenes y estructuras totalitarias. A La barbarie de la ignorancia de George Steiner se suman El elogio de la lentitud de Carl Honoré (con el que espero compartir aventuras en breve). Dos enfermedades graves de rabiosa actualidad: el tiempo y el silencio. Dos remedios milagrosos: ser el tiempo que nos queda por vivir (como decía Josep Soler) y educarnos en el noble arte de conversar.
por David Criado | Dic 19, 2012 | DESARROLLO PERSONAL

«Cada hombre es lo que hace con lo que hicieron de él»
inhumano Jean Paul Sartre
Me encanta la vida, estoy sobre todo enamorado de ella. Jamás me ha dejado fuera. Nunca me abandona y nunca la he abandonado. Siempre confió en mí. Te garantiza desde el inicio que habrá un único expediente de regulación o tal vez un gran despido pero solo después de un largo viaje. Tuve momentos realmente complicados, momentos maravillosos de placer y de dolor y siempre estuvo no a mi lado sino en mí. Sentía realmente que yo era ella y que ella era yo.
Y sin embargo ahora todo lo que nos queda es un miedo pavoroso a ser nosotros mismos, a apostar sin dilación por aquello que queremos ser sin garantías, simplemente un miedo a equivocarse, a rechazar aquello que nos anula y hace de nosotros pequeños pedazitos de constancia. Si volviera a nacer seguramente acabaría siendo el mismo, lo que sea que eso signifique. Pese al fracaso y al éxito, muy lejos del mundo que heredé, intentando escribir mi mundo propio, rebelándome e invirtiendo en rebelar a otros. Mark Twain dijo una vez «Cualquier hombre con una idea nueva es siempre un loco hasta que la idea triunfa«.
He cometido tantos errores y tan graves que todos ellos pasaron desapercibidos para otros. Parecían parte de mí y de mi sueño. En todos esos errores, incluso en estos últimos meses y semanas, creía siempre que hacía lo correcto. No confiaba en el proceso sino en las personas, no trabajaba por alumbrar enormes teorías sino por mantenerme cerca del sentido común y de la naturaleza de las cosas. No lo conseguí innumerables veces, no lo voy a conseguir otras tantas más. Mi cultura es tristemente marginal, en todas mis conversaciones hablo de lo mismo. He conseguido alcanzar la gloria en momentos de dispersión y foco. Cada segundo maneja su lenguaje. Hay un creativo dentro de mí, siempre tiene hambre pero solo a veces puedo darle algo que comer. Estoy pensando en mudarme para abaratar costes y encontrar un entorno mucho más favorable para ser persona. En idealista tecleé dos preferencias de búsqueda para lugares habitables. La primera de ellas decía «otra galaxia», la segunda «dentro de mí». Los resultados fueron infinitos. Porque somos infinitos.
El renacimiento; que para mí incluye la respetada búsqueda de Kempis, la indómita pasión de Buonarroti , la atemporalidad de El Bosco, la eterna perfección de Beatrice Portinari y la inspiración brillante que me regaló Ghiberti y que me permitió escapar con dignidad a la existencia contenida de Tiziano; es una época magnífica que se repite continuamente en cada adolescente. No hay mayor maravilla que vivir cada día como si fuera el último ni mayor deseo que sentirse vivo, vivo, realmente vivo, cada mañana y cada noche antes y después de reinventar la vida. Existen constatadas pruebas de todo esto que digo en cada capitulación de nuestros sueños, en nuestra incompetencia épica por proteger aquellos que soñamos. Ninguna de estas pruebas es comparable hoy, esta noche, a la película y adaptación del libro The Perks of Being a Wallflower (Stephen Chbosky, 2012), uno de los mejores cantos en defensa de la adolescencia jamás rodados.
Si aún no eres consciente de qué te pasó o de qué te está pasando, solo hay una respuesta. Cambia en cada momento pero solo hay una. Tal vez te ayude a encontrarla esta película. Personalmente se la dedico a todos los amigos del método que no paran de fabricar nuevas cajas y armaduras para la batalla como si el corazón de cualquiera de nosotros fuera una cadena de montaje de muñecas rusas. Una gran cantidad de momentos componen las cartas que escribe Chris, un alter ego vorpal eternamente callado y tímido incapaz de encontrar su sitio en este mundo, que disfruta de pequeñas sorpresas y descubrimientos durante el viaje. He de decir que una gran cantidad de películas que cruzan el atlántico y abordan la amistad, el conflicto familiar, el amor entendido, me están fascinando por completo. La mayoría de ellas están basadas en libros que han tenido enorme aceptación y difusión allí y eso renueva de una manera loca mi esperanza por la supervivencia de lo que somos.
Cierro esta breve reseña escapando de la pena y del consuelo, sabiendo que muchos de mis amigos están buscando su sitio en estos momentos muy lejos de mí ante una insultante adversidad. Lo que ahora quiero compartir es que sigo creyendo en mí, en lo que hago, en lo que siempre he sido y en lo que podemos llegar a ser. Estos son, seleccionados, los momentos mágicos de este gran film.
«Tengo que deciros algo. He estado fuera de aquí por dos meses. Es otro mundo, se pone mejor.»
«Estaba en uno de mis peores momentos cuando empecé la preparatoria. Pero tú me ayudaste. Incluso cuando no sabías que estaba pasando o sabes de alguien que pasaba por lo mismo, hiciste que no me hiciera sentir solo. Porque se que hay gente que dice que estas cosas no pasan. Y es gente que olvida lo que es tener 16 o cumplir 17. Y todo esto será historia y nuestras imágenes se volverán viejas fotos y todos nos volveremos el padre o la madre de alguien. Pero justo ahora, estos momento no son historias. Esto está ocurriendo. Estoy aquí y la estoy viendo a ella. Y ella es tan hermosa… Lo puedo ver. Es ese momento en el que sabes que no eres una historia triste. Estás vivo. Y te levantas y ves las luces en los edificios y todo lo que hace que te preguntes. Y estás escuchando esa canción, con la gente que más quieres en este mundo. Y en ese momento, lo juro, SOMOS INFINITOS.»
por David Criado | Dic 16, 2012 | DESARROLLO PERSONAL

«Para conectar realmente con las personas y ayudarlas, tienes que ser un espejo«
Madre Teresa (compartido por JM Luzárraga en Casa Arregi, Oñati)
Los que ahora pronuncian las palabras LeanStartup seguramente no conozcan la historia de una de las más grandes aventuras surgida a partir de una idea, un prototipo rudo, determinación y la fe en la fortaleza de un equipo.
Cuando en 1947 Thor Heyerdhal intentó demostrar que siempre había sido posible cruzar el Pacífico con la sola ayuda de una balsa y una vela, nadie le creyó. Por su mente entonces no pasó la idea de renunciar a defender su propio sueño y a más de 10 años de investigación en Fatu Hiva (Polinesia) junto a su esposa. La mayoría de investigadores aseguraban que algunos nativos procedentes de Asia habían accedido a Polinesia mediante largas rutas de navegación a bordo de grandes navíos o barcos primitivos dotados de cierta complejidad técnica. Esta teoría se veía reforzada por un argumento muy sencillo: ningún ser humano hubiera ido capaz de navegar 5000 millas (8000 kilómetros) desde América en pequeñas barcazas a merced de las corrientes oceánicas. Thor Heyerdhal pensaba lo contrario…
Ha llegado a la gran pantalla la adaptación del documental que en 1950 el propio Heyerdhal rodó sobre una de las mayores aventuras naúticas de la historia. Kontiki (2012, Joachim Rønning, Espen Sandberg) es una película noruega que nos relata no solo la propia aventura sino los precedentes de la misma. Gran banda sonora y mejor trama tejida a partir de los hechos narrados en el libro y documental de Heyerdhal.
Algunas coincidencias entre las mitologías y arquitecturas inca y la polinesia, los descubrimientos de hombres de raza medio blanca durante la colonización polinesia y algunos testimonios incas recogidos por los españoles, hicieron pensar a Heyerdhal que existían más que sobradas razones para sostener que los primeros habitantes de Polinesia habían emigrado desde Perú hacía más de 2500 años. Tras numerosas visitas sin éxito a los principales periódicos y editoriales de la época en una búsqueda frustrada de financiación para sufragar investigaciones en detalle, decidió emprender una de las más grandes aventuras de la historia reciente de la Humanidad. Gracias a la ayuda del gobierno peruano logró reunir los recursos suficientes para construir una barcaza precaria con los mismos materiales que los incas podrían haber utilizado en su búsqueda de nuevas tierras. En contra de la opinión pública y de la académica, reunió a un equipo formado por suecos y noruegos y en 1947 definió la estrategia de su expedición:
POR QUÉ: Estaba convencido de que su teoría era completamente cierta y necesita demostrar y demostrarse que era posible hacerlo.
QUÉ: Una ruta hacia la Polinesia desde América que comprendía 100 días de navegación a través del Pacífico cubriendo 4300 millas naúticas de viaje.
CÓMO: Una balsa, un equipo y un reto. La balsa fue construida con 9 troncos, cada uno de ellos de 13,7 metros de largo y 60 centímetros de diámetro, unidos entre sí con la ayuda de cáñamo Transversalmente a los troncos principales se ubicaron troncos de balsa de 5,5 m de longitud y 30 cm de diámetro, a intervalos de 1 m, y con el objetivo de dar soporte lateral. Se utilizaron tablones de pino en los laterales de la embarcación, así como secciones de 60 cm de largo y 2,5 cm de espesor del mismo material para las acometidas. Ningún material de hierro o metal fue empleado en la construcción. El equipo lo formaban Thor Heyerdahl, Knut Haugland, Bengt Danielsson, Erick Hesselberg, Torstein Raaby y Herman Watzinger; perfiles multidisciplinares pero complementarios que construyeron un mismo reto a lo largo de su viaje. El reto era VIVIR y llegar vivos.
Partiendo del puerto de Callao (Perú) y tras 101 días de navegación extrema, la pequeña barca bautizada como Kon-Tiki en honor a Tiki, el dios del sol polinesio, llegó a Raroia (Polinesia) el 7 de Agosto de 1947. Nada de esto sería completamente fascinante e inspirador si no conociéramos el hecho contrastado de que Thor Heyerdhal nunca supo nadar.
La épica historia de Heyerdhal cruzando el charco con apenas unas provisiones es altamente útil para recordarnos el valor de la convicción y la fe en un sueño. Por encima del escéptico y del desengañado. Más allá de eso que todos llaman lo correcto. Heyerdhal prototipó su experiencia de aprendizaje en un formato más que razonable. Trascendió la barrera del aprendizaje individual para dibujar aprendizaje sobre otros. Porque vivir no es solo una experiencia compartida sino el único medio eficiente para aprender y rebelarse. Os animo a leer algo que escribió Heyerdhal en uno de sus primeros libros tras su primer viaje con su esposa Liv a Polinesia:
«Dos jóvenes inmaduros subían al tren para embarcarse en Marsella en un enorme buque transoceánico, con billete hasta Tahití. Un billete hacia el paraíso, pensábamos nosotros. Pero la conclusión del viaje fue precisamente que no se puede comprar la entrada al paraíso. Los que conseguían encontrarlo, lo hallaban en su interior y hasta allí llegaban gratis. Todo lo que he visto y leído me ha enseñado que, en este planeta, el infierno y el paraíso no están en lugares distintos, sino siempre en el mismo. No se puede elegir uno u otro simplemente mudándose. Los dos aparecen como amigos inseparables por muy lejos que se viaje.»
Hunt for paradise, 1938
NOTAS:
El libro Kon-Tiki ekspedisjonen (1948, Heyerdhal) en el que relata su experiencia de aprendizaje ha sido traducido a 70 idiomas y ha vendido más de 50 millones de copias en todo el mundo. El documental Kontiki (195o, Heyerdhal) ganó un oscar de la Academia.
Desde hace menos de dos años en Noruega existe una impresionante propuesta para formular nuevos modelos de aprendizaje basados en la experimentación denominada Thor Heyerdhal Videregäende Skole, una escuela de 24.000 m2 donde la curiosidad, la esperanza y los espacios abiertos sacan a los estudiantes de las clases para aprender de forma operativa evitando posibles barreras morales prejuicios. Los estudiantes aprender Diseño, Electrónica, Negocios o Ingeniería en un ambiente inspirado por la historia de superación de Heyerdhal. Más info aquí.
por David Criado | Dic 6, 2012 | DESARROLLO PERSONAL, INICIATIVA y SUPERACIÓN

Greenpeace Zurich protest against the finantial sharks. «All together» attitude 😉
As a completely crazy fan of Jack Kerouac´s way of life, this post must have this title 😉 During the last days I was engaged in a fascinating learning journey to myself. Yeah, I know, as usual 😉 But this time it was different because I shared the learning experience with passionate young entrepreneurs and dreamers. Yeah, I know, as usual 😉 But this time I did it inside a bus without Wi-Fi moving to Paris. Oh yeah!!! 😉 You all know that the situation in Spain is not the best for dreamers, in fact probably some of you think it´s the worst in Europe. But 23 mad people thought otherwise when they embarked on a bus that would travel from Barcelona to Paris visiting Valencia, Madrid, Santander, Bilbao and Donosti to share their experience and real projects with other european dreamers. StartupBus is added now to my disruptive learning experiences.
StartupBus experience started a couple years ago in US and now becomes reality in Europe. The crazy dream of Elias Bizannes became true and it was the first succesful model to all buspreneurs. Since more than 30 cities worldwide routes begin to participate in various international competitions are organized on a continental match. This year, two brothers in Spain have managed all the the needs to introduce a route from our country to participate in European competition to be held on December 2012.
During this experience a group of cameras has filmed the entire process to make a documentary that for many will serve to explain what happened inside. The level inside the spanish bus was high in terms of enthusiasm and skills of all members. My first contact occurred in Madrid when we attended several master classes before departing. Once inside the bus I wanted to introduce myself and share some concerns with the crazy brothers Alvarez and company. During the first few hours I knowed the ideas and projects of all buspreneurs and I decided to help in business and strategy in the final projects. During the trip I was reporting the whole experience because I was interested to know also how the Viking Bus, the Oxford Bus and the French Bus were living their respective journeys. We had a major problem leaving Madrid with the Wi-Fi connection but we convert that problem into an opportunity relating us quickly and dynamically inside without any communication barrier, like building a little P2P culture inside ;)) I think with the internet and other facilities we may not lived the experience as intensely as we lived it. I remembered the first day allways sharing ideas and impressions, prototyping from scratch, visiting and talking with all the bus. On arrival at Donosti, I saw some of my brothers minners and shared a funny night with them before going to sleep (thanks, Ñaki!!!)

Great moments during the trip with the Eiffel Tower behind and in several cities with Carlos, Jaume, Aymar, Joel, Joan, Samantha, Tere, Chris, my timisister Ane, Liher, great Zaldua, Pedro, Pascual, Bruno, Lucas, Óscar,…
During the trip we met innovation and coworking centers and met interesting people. Upon arrival in Paris, the Spanish detachment competed with other buses in the semifinals for a chair in the final. No luck for two Spanish projects but The Best DJ is went directly to the final after a great pitch. The other two projects were in the playoffs competing with more than 10 projects for final access to Microsoft day before LeWeb Conference.
I liked seeing already in the semifinal that most every team proposals were aimed at solutions for problems related with employment, collaborative management, user empowerment, crowd and geolocation. With a real project preparing the final we only have one inmediate goal: put the other two projects in the final. After a competitive struggle the jury appreciated spanish Beat Goliat as a real and well-crafted proposal to change the world but without an acceptable pitch and comunication. This fact prevailed over the high quality of communication proved by the great team of Qbeeco, one of my favourites pitchs in all the process (including the final) as I recognized to his team. At the last moment the spanish JobSquare team decided to leave the competition so… at the end two projects of StartupBus Spain were in the final competing with the other 7 startups, becoming mad in the taxi to Microsoft (Dani, thank goodness you’re alive and that Paris does not have you as Hangover Part II in Bangkok ;).
After the high voltage revolution we closed the experience with a party in Paris with all buspreneurs gathered (french, vikings, spaniards, germans and english entrepreneurs). Spaniards gave everything in all senses and emptied several bottles of gin before boarding the bus. Undoubtedly one of the highlights was sharing lessons learned on the journey back to Barcelona inside the bus in the early hours of … ok I lost all references, I don´t remember when it was… aftermath of several happy days without sleep ;)) I proposed to share what we all have learned in the pure style of my loved Team Academy community 😉 When we arrived to Barcelona, a excited bus driver told us the story of his son, an engineer who had to emigrate for a better life to other country. The driver said: I wish you the best luck in the world, you have to take the country forward. You are completely admirable as the only future that we can have so work hard and thank you for the attitude you show me during these days. As old as I am, I have learned much from you. Incredible words to close an incredible journey, don´t you think??
My feedback is very positive after millions of chips consumed, and other fast food like sandwiches, chocolates, biscuits…; after sleeping on the floor, being cold, having a broken back at the mornings… I lived with wonderful people and learned a lot of you trying to give the best of me. I hope I have covered all your expectations, buspreneurs. A big hug and the best luck for you.
NOTE: You can get more information about my work here
por David Criado | Dic 6, 2012 | EQUIPOS y BIEN COMÚN, INICIATIVA y SUPERACIÓN
«Life is just about NOs and Oh yeahs!»
Anna Muni, spanish buspreneur 2012
In a later post I will talk about my adventure in StartupBus Europe, but now I want to share my alternative defense of the Beat Goliath project with the StartupBus community. Beat Goliat was one of the final projects in the competition and I want to Thank all my buspreneurs teammates for everything they learned and what they taught me building this project. If I had to defend or explain Beat Goliat, I will say something like this…:
Sorry jury, sorry Elias, but life on earth is not Silicon Valley. Although Silicon Valley may be a shared reference for many, the reality of the world is extremely more complex than a great ecosystem of entrepreneurship and agile culture. It´s allways more complex than a city, more complex than a citizen or a user. And that’s the reason because San Francisco has one of the highest levels of homeless people in a western city while be the innovation center of our world . Every day I get up in the morning and every night at bedtime, I realize these complexities. Today I´m going to tell you a proposal to improve, help and encourage people to fight against these complexities wherever they live.
When I think what is the most important argument to live, I allways think on my grandfather. Not all the grandfathers of spanish people were bullfighters and not all the grandmothers were flamenco dancers, but of course this was my case at least in half. Why my grandfather went day by day to the bullring to fight against one of the most powrful animals in the earth? This question has been with me all my life and probably today, after this learning experience, I have an answer. He went there, to the sand, because my family was hungry in spanish civil war but Why he went there day by day in one of the most richful periods of spanish history before that? He was playing with his live, you know? Maybe he could choose another employement but he didn´t. I think the answer is a mix of passion and social recognition.
When we leave our confort zone, we can grow up as fast as we want. Because there is no barriers in the land of the personal development. But what about sharing a social development? Many of the heros we have here today have the world PASSION in their foreheads. We are all talking today the same language presentation after presentation. The jury is tired of hearing the same words: geolocation, mobility and crowd. And that´s happen because a reason. It´s not about Barack Obama, Angela Merckel or Mariano Rajoy. Of course is not about the last one 😉 But future and life on earth is about YOU. Concepts like family, respect, commitment, peace or angry birds depend on you. Neither fucking Google nor Microsoft are going to change the world. Don´t expect that in your chairs right now, buddies. They know it because they are playing anothe league, another division. When I studied free software communities I learned one thing: as my grandfather, we need social recognition and support. But first we need to talk in the same level to the brands and corporations. We couldn´t do this till the moment before you entered in this auditorium. But now…
I want to introduce you Beat Goliat, the speaker of the crowds to build a better and a real user-centered brands and services by a new concept: social complain. You are not crazy enough if you think that you can change the world only with a single complain. Do it social, do it with others, beat your own Goliat with others Davids. We are going to empower the user while brands are going to improve their services. We hack the system to make it more human and real. Whith this idea users have a voice and the brands have a real-time connection with user needs through hard feedback. We commerce with this big data and we build strong campaigns to talk with corporations in their level. Because we can use the market to humanize the market. And this is Beat Goliat, a shared dream for all. Thank you so much for your attention and keep on rocking!
That´s all! Dream and share, friends!!. I want to thank Joan, Samantha and Elias for their commitment and contribution to the amazing adventure of StartupBus Europe. I´m a profesional experience designer and I have to recognize that your work was awesome, guys!!