por David Criado | Nov 11, 2015 | DESARROLLO PERSONAL

«Nadie hay entre los que se dedican a la ciencia que no esté convencido asimismo de que ama la verdad»
John Locke (filósofo y médico inglés, siglo XVII,
Ensayos sobre el entendimiento humano, IV, 19,1)
A menudo me declaro divulgador, practicante activo y -en los días en los que me vengo arriba- experto en viejas tecnologías. Por este motivo, el artículo que ahora lees -lector o lectora- resuelve una deuda que yo tenía contigo. Ser experto en viejas tecnologías es compatible con cualquier profesión. En la medida en que la que tú lo seas y te rodees de gente que lo es, las cosas sin duda te irán mucho mejor.
Hoy pretendo compartir contigo la enorme importancia y el valor diferencial de formar, entrenar, cuidar y mantener en tu organización a expertos en viejas tecnologías. Lo haré de acuerdo a tres sencillos apartados:
- Qué es la tecnología: una definición de la palabra y sus implicaciones
- Nuevas y viejas tecnologías: una comparativa rápida
- Las 4 viejas tecnologías más rentables: una selección cuidada y rigurosa a partir de mi experiencia acompañando organizaciones, equipos y personas
Comenzamos.
QUÉ ES LA TECNOLOGÍA
“Si queremos salvarnos de morir ahogados por los medios que nosotros mismos hemos creado, primero debemos observarlos y luego entenderlos”.
Herbert Marshall McLuhan (filósofo, erudito y profesor, 1969)
La palabra tecnología proviene, como tantas otras cosas, de la voz griega τεχνολογία technología, cuya etimología está formada por τέχνη (téchnē) que significa arte, técnica o destreza; y por λογία (logía) que significa estudio o tratado.
En su pionero y ya muy conocido ensayo La aldea global, el profesor Herbert Marshall McLuhan se atrevió a plantear las consecuencias que un mundo completamente conectado podría tener para los seres humanos. Hace más de cuarenta años el sugirió cuatro preguntas que deberíamos responder para cada tecnología:
- ¿Qué genera, crea o posibilita?
- ¿Qué preserva o aumenta?
- ¿Qué recupera o revaloriza?
- ¿Qué reemplaza o deja obsoleto?
No quiero hablar mucho más de McLuhan, no sea que me pase lo que lo pasó a aquel redicho catedrático en la cola de cine en la película Annie Hall tras hablar con tanta seguridad sobre la obra del profesor 😉 Solamente añadiré que considero que estas cuatro preguntas son muy útiles y las utilizaré como guía para explicar el enorme potencial que tienen las viejas tecnologías que hoy compartiré contigo.
Por otro lado, como bien explicaba en su artículo Educación tecnológica para comprender el fenómeno tecnológico el doctor en Física Carlos Eduardo Soliverez «las tecnologías son tan antiguas como los seres humanos. (…) Como señala el entomólogo y biólogo Edward Osborne Wilson en su libro Sociobiología, la nueva síntesis (Ediciones Omega; Barcelona; 1980; pp. 178-182), el mero uso de herramientas es un fenómeno que los seres humanos compartimos con muchos animales: avispas que usan piedritas para cerrar la entrada de sus nidos, pájaros que manipulan ramitas con sus picos para extraer insectos, chimpancés que rompen cáscaras de frutos con una piedra, son sólo algunos ejemplos. La gran diferencia es que las herramientas de esos animales son objetos naturales, mientras que las personas las fabricamos a medida de nuestras necesidades; este rasgo, el propósito, parece ser específicamente humano.»
Una de las entrevistas más esclarecedoras sobre el increíble agravio comparativo que supondría para el ser humano compararse con el resto de especies, la realizó Eduardo Punset al mismo E.O. Wilson y su visionado es más que recomendable.
Tras este breve repaso por el estudio de la tecnología, una buena definición que tome como punto de partida tanto la etimología de la palabra como las consideraciones de estos estudiosos, podría ser la siguiente:
Toda tecnología es el conjunto de artes, saberes, habilidades y destrezas que permiten el aprovechamiento práctico del conocimiento, con el fin de satisfacer las necesidades y deseos de las personas.
NUEVAS Y VIEJAS TECNOLOGÍAS
«Las ideas se tienen, en las creencias se está»
José Ortega y Gasset (filósofo español, siglo XX, Ideas y creencias, I, 1)
Hablamos desde hace años de las nuevas tecnologías. Sin embargo nadie parece reparar en la increíble trayectoria de aprendizaje en viejas tecnologías que la Humanidad ha tenido durante miles de años. Algunas de las viejas tecnologías que hoy compartiré contigo llevan siendo útiles al ser humano desde tiempos inmemoriales. En realidad son la única base útil para que las nuevas puedan resultarnos provechosas.
Para poner en contexto el salto cualitativo en la trayectoria histórica de aprendizaje entre las nuevas y las viejas tecnologías, quiero repasar contigo -lector o lectora- tres datos:
- El Homo Sapiens (tú) con capacidades mentales para aprender, inventar, transmitir y manejar tecnologías complejas en torno a «comportamientos modernos» aparece en Etiopía hace unos 200.000 años, aunque el Homo Erectus ya utilizaba herramientas a diario. Desde entonces no hemos parado de usar y perfeccionar muchas de las viejas tecnologías que hoy compartiré contigo.
- El primer ordenador patentado lo construyó en 1938 un alemán que trabajaba en el apartamento de sus padres. Era una calculadora mecánica denominada Z1. Este es el punto de partida del uso y perfeccionamiento de las nuevas tecnologías.
Entre el primer hecho histórico y el segundo distan aproximadamente 190.923 años de práctica y entrenamiento. Entre el segundo hecho histórico y tu teléfono móvil distan 77 años de práctica y entrenamiento. Puede que tengas abuelos vivos probablemente mayores de 77 años.
Creo en las nuevas tecnologías como parte del progreso de la Humanidad. Creo que son útiles y creo que con un uso humano pueden resultar inteligentes. Para favorecer ese uso humano, nada mejor que ser fieles a las viejas tecnologías como principio y fin y a las nuevas como medio. De una organización, un proyecto, una relación o cualquier cosa.
LAS 4 VIEJAS TECNOLOGÍAS MÁS RENTABLES
«Todas las cosas exteriores nos someten y esclavizan desde el momento en que las codiciamos»
Epicteto (filósofo griego y esclavo romano, siglo I, Máximas)
He creído y creo ver en las personas la única oportunidad para salvar y mejorar a diario el mundo en el que viven. Creo en las cualidades propias de la naturaleza humana y creo también que debes entrenarlas. Las viejas tecnologías tienen que ver con estas cualidades. Pero en contra de lo que mucha gente cree, para utilizarlas de forma efectiva, deben entrenarse y mejorarse a diario.
Estas son las cuatro viejas tecnologías más rentables que conozco por orden de prioridad:
LA ACEPTACIÓN y EL SENTIDO DEL HUMOR
- ¿Qué genera, crea o posibilita?: Tanto el autoconocimiento (la exploración consciente de lo que uno mismo es) como el conocimiento de la realidad a la que uno pertenece (a exploración consciente de la sociedad, el entorno o el grupo) han sido la base de cualquier progreso humano a lo largo de la Historia. Nadie puede ir a ningún sitio si no acepta lo que es para inmediatamente después aprender a crecer y rebelarse. Nadie. Si no entrenas tu capacidad de aceptación, puede que nunca llegues a ninguna parte porque no tienes ningún lugar del que partir. Como hemos dicho tantas otras veces, aceptarse no es resignarse. La aceptación genera, crea y posibilita el movimiento. Alguien que se acepta, por otro lado, es alguien que no teme reírse de sí mismo y que puede aportar ese gran desatascador de relaciones que es la sonrisa y el sentido del humor, tecnologías altamente valiosas.
- ¿Qué preserva o aumenta?: Para mí la aceptación es una de las diez asunciones básicas para la construcción de criterio y pensamiento propio en la persona. La aceptación de uno mismo y de los demás preserva nuestra especie gracias a mecanismos de interdependencia complejos que conectan con lo racional y lo emocional que hay en nosotros. La aceptación de uno mismo además aumenta la compasión hacia otros, lo que ayuda a la supervivencia de cualquier grupo humano y/o proyecto. El sentido del humor inteligente y respetuoso por su parte prolonga el goce y disfrute de los momentos más placenteros y mitiga el sufrimiento en los momentos de padecimiento o dolor.
- ¿Qué recupera o revaloriza?: Creo que la aceptación pone en valor las relaciones humanas estableciendo posicionamientos sociales (roles) entre las personas. Esto ayuda a establecer responsabilidades desde lo que cada uno es y desde sus compromisos, contribuyendo a recuperar orden, foco y organización en momentos de máxima emergencia. La tecnología de la aceptación además pone en valor el sentido de humildad en momentos clave en los que se han producido escaladas de egoísmo individual o en grupos. Ello favorece el pensamiento altruista y fomenta la supervivencia de los intereses del grupo sobre los intereses de una sola persona.
- ¿Qué reemplaza o deja obsoleto?: La aceptación jubila y deja obsoleta a la también vieja tecnología de la negación. A través de la negación un individuo desentiende su propia realidad o la de otros, lo que genera expectativas imposibles sobre necesidades irreales. Esto se traduce en frustración y desapego. La aceptación reemplaza estos sentimientos por medio del pensamiento racional y la inteligencia emocional. Un ejemplo de cómo pasar de la negación a la aceptación lo tuvimos recientemente en el mundo de las nuevas tecnologías con el caso de Essena O´Neill en instagram. El sentido del humor inteligente evita la pose superficial y el rigor intratable de la seriedad inaccesible de un discurso teórico. El buen humor es sin duda el mejor medio para cualquier fin.
EL DIÁLOGO SIGNIFICATIVO y LA HONESTIDAD
- ¿Qué genera, crea o posibilita?: La honestidad tiene que ver según Confucio con hacer predecibles nuestros comportamientos siendo sinceros y expresando lo que pensamos, y abandonando la pretensión de una gratificación inmediata. La honestidad tiene también que ver con la bondad o la búsqueda de reciprocidad entre personas (justicia) siendo coherentes entre lo que pensamos, decimos y hacemos. Y por último tiene que ver con la autocomprensión previa y la comprensión de los demás, es decir con la aceptación. La honestidad genera y posibilita por tanto la empatía y las relaciones saludables. La honestidad es la base de la inteligencia conversacional y de los diálogos significativos. Partir de la intencionalidad de ser bueno, sincero y útil para mí mismo y para otros es la base de la tecnología del diálogo.
- ¿Qué preserva o aumenta?: Hace tiempo que los chicos del Manifiesto Cluetrain nos enseñar que los mercados y las empresas son conversaciones. La psicóloga y estudiosa de la digitalidad Sherry Turkle reclama el papel de las conversaciones escandalizada por aquello mismo que ella defendía hace 15 años: el papel predominante de una existencia digital (chats, correos, imágenes,…) sobre una existencia real. El diálogo efectivo y real es complejo y suel entrenarlo con alumnos y clientes a diario, pero es tal vez la única garantía de auténticas relaciones humanas y efectivas. Por encima de los debates que ves a diario -lector o lectora- en los medios de comunicación y en los parlamentos, la vía del diálogo y la honestidad garantizan la transmisión de conocimiento y el aprendizaje.
- ¿Qué recupera o revaloriza? El diálogo es la tecnología civilizadora por excelencia. Recupera el valor de las personas y de sus ideas y sobre todo el respeto y el afecto por otras personas e ideas. El diálogo es la base de la convivencia social, y la honestidad que sustenta a los usuarios del diálogo es el ingrediente clave del entendimiento humano y el progreso. Allí donde hay posturas enfrentadas no existe el ánimo por comprender al otro. Allí donde se crean nuevos escenarios a partir de los escenarios propios de cada persona, existe el diálogo.
- ¿Qué reemplaza o deja obsoleto?: La tecnología del diálogo reemplaza al aislamiento y la incomprensión. Es el ejercicio de responsabilidad más completo ya que permite a otros su derecho a ser responsables y promueve una visión integradora e integral del conocimiento humano. El diálogo efectiva también favorece la personalización y el trato humano a las personas, dejando obsoletos los procesos uniformizadores que penalizan las diferencias naturales entre individuos. Todo ello promueve la creatividad y la innovación que son los reemplazos naturales de la reactividad y el conformismo.
EL PENSAMIENTO CIENTÍFICO y EL RAZONAMIENTO LÓGICO
- ¿Qué genera, crea o posibilita?: El pensamiento científico es sin duda una de las mayores conquistas del ser humano y a mi modo de ver complementa a la perfección la visión del saber mítico (o religioso) y el pensamiento cotidiano en aquellos límites en los que estos últimos son insuficientes. El razonamiento lógico desde los antiguos griegos aporta una base sólida sobre hechos observables, ordenando el conocimiento disponible y estableciendo conclusiones a partir de principios y leyes que permiten la toma de decisiones. Impide a la mente humana contentarse con atajos y la entrena en el ejercicio de la plena responsabilidad sobre los actos.
- ¿Qué preserva o aumenta?: Favorece el pensamiento crítico por su naturaleza reflexiva. Aumenta la predictibilidad de los acontecimientos dando a las personas seguridad en su vida diaria. Aumente el número de certezas básicas de las personas hasta que no se demuestre lo contrario y favorece el entendimiento colectivo por encima de las diferentes culturales o prejuicios individuales.
- ¿Qué recupera o revaloriza?: Recupera una visión conjunta sobre el medio o el método a seguir por varias personas o grupos con el fin de explorar una realidad compartida. Revaloriza la toma de decisiones y el apego a la realidad inmediata, lo que pone en valor a su vez las experiencias que vivimos a diario y las conclusiones que establecemos a partir de esas experiencias. Además la argumentación y el razonamiento lógico (incluyendo la comprensión científica de nuestras emociones e inteligencias) favorecen el trabajo en equipo y la consecución de resultados.
- ¿Qué reemplaza o deja obsoleto?: La tecnología de la razón y el pensamiento científico dejan obsoletas algunas creencias limitantes que tienen que ver con la exclusión o la particularidad de grupos de personas. En particular me refiero a los prejuicios de tipo sectario y no integrador. Creo que además el pensamiento científico y la razón humana son un gran complemento a los usos, ideas, hábitos y costumbres (cultura) ajenos a efectos de su comprensión y contextualización.
EL PENSAMIENTO ESTRATÉGICO y LOS SISTEMAS DE GESTIÓN
- ¿Qué genera, crea o posibilita?: En cada propuesta que elaboro para mis clientes incluyo esto: «Hace ahora unos años Gary Hamel ideó junto a otras buenas eminencias del management, el proyecto Management Innovation eXchange, una de las más ambiciosas apuestas para reinventar el concepto de la ciencia de la gestión en el siglo XXI. Este proyecto propone 12 áreas de cambio y parte de dos afirmaciones: la primera de ellas era que el mayor avance tecnológico de la humanidad son los sistemas de gestión; la segunda de ellas era que estos modelos deben reinventarse para asumir nuevos retos.» Los sistemas de gestión representan la forma de relación humana más productiva en términos cualitativos y cuantitativos inventada hasta la fecha. Han hecho posible que nos organicemos para que tener una higiene, una salud y una calidad de vida dignas en muchas partes del planeta. Son también generadores de algunas desigualdades internas de las organizaciones y entre diferentes regiones del planeta. Mi foco profesional consiste en trabajar para generar sistemas de gestión que posibiliten el desarrollo humano saludable dentro de las organizaciones. Muy ligado a los sistemas de gestión se encuentra la estrategia o el modo en el que logramos nuestros objetivos
- ¿Qué preserva o aumenta?: Toda persona necesita una estrategia para ser aplicada consciente o inconscientemente consigo mismo o con otros. Llamo pensamiento estratégico a la forma consciente en la que las personas somos capaces de favorecer la obtención de buenos resultados a partir de una toma de decisiones fundada y realista. Es por ello que el pensamiento estratégico, bien ejecutado, aporta satisfacción y realización a las personas y un horizonte o una meta, algo así como un reto y un sentido de existencia o trabajo. No es poco. Por su parte los sistemas de gestión -muy ligados a la estrategia relacional- aportan una estructura comprensible a las personas para poder lograr y trabajar por ese reto o sentido. Creo que tampoco es poco.
- ¿Qué recupera o revaloriza?: A nivel social, tanto los sistemas de gestión como el pensamiento estratégico son el pegamento de cualquier sociedad. Ha evolucionado a lo largo de la Historia desde el gobierno de unas pocas personas en la cultura tribal hasta el gobierno global y local de 7.000 millones de personas con comportamientos humanos interdependientes pero con una misma filosofía compartida y fines vitales similares: supervivencia, desarrollo y convivencia. A nivel individual, el pensamiento estratégico promueve tanto la aceptación, como la honestidad y el pensamiento crítico.
- ¿Qué reemplaza o deja obsoleto?: Los sistemas de gestión más avanzados (últimos 200 años) evolucionaron las viejas estructuras escolásticas o tribales basadas en la supremacía y el dominio de las castas por derecho, dando paso a una cultura del control a través de la disciplina. La mayoría de modelos con los que trabajo en la actualidad han evolucionado desde esos modelos a modelos centrados en las personas y en la generación de una cultura del esfuerzo y el respeto mutuo. Voces como la de Byung-Chul Han alertan sobre un nuevo peligro que utilizaría nocivamente este esfuerzo lícito que hacemos muchos para mejorar los sistemas de gestión. Según él y otros autores en la actualidad se estaría produciendo un nuevo control a través del rendimiento. Este nuevo paradigma estaría basado en el fomento de la positividad absoluta y la superación trasladando la responsabilidad plena del éxito a cada individuo y no a su contexto por medio de nuevos modelos de presión. Esto equivaldría a pasar de una sociedad del «no se puede hacer esto» a una sociedad ridícula del «tú puedes con todo». Creo que algo de esto se está produciendo en algunas organizaciones con las que colaboro, forma parte de mi responsabilidad y de la tuya contrarrestar esta tendencia happy flower.
Creo sinceramente que si eres capaz de cuidar y entrenar estas 4 viejas tecnologías, tanto como de rodearte de gente que las cuide y las entrene, tus posibilidades de éxito y realización serán enormemente grandes.
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por David Criado | Ago 10, 2015 | DESARROLLO PERSONAL

«Hacer planes de futuro está exclusivamente reservado para aquellos que son capaces de vivir por completo en el presente»
Alan Watts, filósofo, escritor y sacerdote
He creído ver y conocer la verdad sobre las relaciones humanas en varios momentos de mi vida. En todos ellos estaba equivocado. Hoy creo que esta verdad no se busca sino que se practica. En este artículo compartiré algunas claves para practicarla de cara a la obtención de los mejores resultados. El lector o lectora se preguntará sobre las fuentes científicas o bases racionales de este artículo. También esperará que yo aporte datos estadísticos reales sobre la fiabilidad de estas claves. Lo más parecido a todo esto que yo humildemente puedo compartir es lo siguiente:
Décadas después de mi primer intento por conocer la verdad sobre las relaciones humanas, comparto en este artículo no más de diez claves universales que jamás me han fallado a la hora de tratar a otros. Me refiero más en concreto a que nunca me han fallado a la hora de tratar con cualquier persona, en cualquier momento y en cualquier lugar.
Se que probablemente esta no es la fiabilidad universal que usted esperaba. Yo sin embargo tengo la certeza de que este breve listado que hoy comparto es lo único que realmente me importa. Ser fiel a él siempre me ha proporcionado no buenos sino los mejores resultados.
Por último tal vez sorprenda al lector o lectora la siguiente afirmación: Puedo contar con los dedos de una mano a las personas que forman parte de mi vida diaria y que considero que saben poner en juego y rentabilizar el verdadero potencial de tan solo una de estas claves. Sin embargo en esa afirmación radica precisamente la riqueza de las mismas. Algunas de ellas al ser leídas parecen completamente obvias, pero su verdadero valor radica en que muy pocas personas del planeta en muy pocos momentos de su vida las practican. La clave de este breve listado consiste en practicar una y otra vez cada una de estas claves, recogiendo y disfrutando sus increíbles resultados. El éxito sin duda animará al lector o lectora a seguirlas practicando. Esa al menos ha sido mi experiencia. Comenzamos.
TODA PERSONA SIN EXCEPCIÓN SIEMPRE LO ES
Solemos cargar sobre las otras personas responsabilidades, aspiraciones o expectativas que ni siquiera cubrimos nosotros mismos. Lo hacemos continuamente olvidando que incluso en su peor momento o su peor gesto, la otra persona es solo eso, una persona. Recordar que ambos somos personas e intentar comprender la vivencia del otro, nos hace crecer también como personas. La mayor parte del tiempo en mi trabajo tan solo descubro y escucho a las personas. Eso es sencillamente todo. Si quiere obtener los mejores resultados con una persona, comience aceptando que es una persona.
TODA PERSONA ES EL RESULTADO DE LO QUE HACE DE FORMA REPETIDA Y DE LAS PERSONAS QUE LE RODEAN
Nadie es lo que tiene, más bien todo el mundo tiene solo lo que es. Además nadie es lo que dice sino lo que hace con lo que es. Y somos relaciones. Coherencia. Con esta palabra escrita en la pizarra mi amigo Javier, profesor de escuela, suele empezar las tutorías con sus alumnos. Una persona no te quiere por decirte lo que a él le gustaría escuchar, sino por aceptarte y tratarte tal y como eres. Los buenos actos son menos poderosos que los buenos hábitos. Por otro lado nadie es lo que dice ser (su curriculum vitae, su perfil de linkedin o las fotos en las que sale sonriendo) sino la cantidad y calidad de amigos que sabe cuidar y conservar. Hablar contigo y conocerte me ayudará a saber quién eres; hablar con aquellos de los que te rodeas y conocerles me ayudará a saber quién puedes llegar a ser. Esto no significa que alguien no pueda evolucionar desde su realidad sino que siempre debe respetarla para partir de ella y superarla. Los verdaderos talentos que he conocido en mi profesión se crecen ante la adversidad y conectan con personas con las mismas inquietudes. Por contra, he trabajado junto a grandes gurús de las relaciones humanas que cobraban trescientos euros por hora pero cuyo historial de llamadas no tenía amigos. Si quiere obtener los mejores resultados, haga siempre lo que dice y no diga tanto lo que hace. Haga esto una y otra vez de forma repetida.
TODA PERSONA BUSCA SENTIRSE SINCERAMENTE VALORADO
Esto implica dos subapartados. El primero es que toda persona espera de ti que reconozcas que él tiene razón. El segundo es que toda espera espera de tí que además lo digas. Incluso la persona con la autoestima más grande que conozcas, no puede evitar sentirse realizado ante tu reconocimiento o tu halago. Seas quien seas. Hagas lo que hagas. Personal y profesionalmente he crecido más a partir del reconocimiento ajeno que del propio. Paradójicamente es también así como me gano día a día el reconocimiento ajeno. Para obtener los mejores resultados con una persona, parta de la base de que esa persona tan solo busca sentirse valorada.
TODA PERSONA NECESITA TU CONFIANZA Y CONFIAR EN TÍ
Los gestos más espectaculares y llenos de valor que me han dado han venido siempre de confiar en otra persona y además decírselo. Los gestos más lamentables y llenos de dolor y miedo que he recibido han partido siempre de momentos en los que he desconfiado de otra persona. Confiar en alguien y decírselo, es decir hacerlo explícito y otorgarle un valor concreto, es el único modo de obtener los mejores resultados. Además por encima de lo que pudieras suponer, las personas están continuamente esperando su oportunidad para confiar en tí. La confianza no se pide, se construye. Nadie te la da sino que te la ganas. Ambos comportamientos -confiar en las personas y hacerte confiable para ellas- representan la madurez relacional estableciendo vínculos sinceros. Por otro lado no debes confiar más en quien repetidamente te demuestra que no merece tu confianza que en aquella persona que sí te lo demuestra. Las relaciones humanas saludables no deben basarse en la igualdad sino en la justicia de los actos. Si quiere obtener grandes resultados, recuerde que la persona con la que está hablando busca tan solo que usted confíe en ella. Hágase a sí mismo confiable.
A TODA PERSONA LE INTERESA LO QUE ELLA PIENSA Y NO LO QUE TÚ PIENSAS
Hace casi cien años el maestro Dale Carnegie ofrecía esta reflexión a los asistentes a sus talleres sobre relaciones humanas. Muy pocas personas han sabido comprender el poder que encierra esta gran verdad. Si se tiene claro que a nadie realmente le interesa lo que piensas sino dejar claro y expresar lo que él piensa, se puede dar un giro increíble a las conversaciones en lo que se refiere a la obtención de resultados. Reto al lector o lectora a que durante una semana permanezca atento a las conversaciones que mantiene con otras personas para observar hasta que punto toda persona busca siempre decir lo que piensa y no escuchar lo que usted piensa. Cuando haya interiorizado esto, dejará gradualmente de intentar convencer al otro para empezar a comprenderle. Lo sorprendente de este cambio no es solo la obtención de resultados increíbles sino el efecto multiplicador de esta actitud. A la hora de hablar con otra persona, haga caso a Sócrates y parta siempre de lo que ella piensa y no de lo que usted piensa si quiere captar su atención, dejar huella y obtener los mejores resultados.
TODA PERSONA SOLO QUIERE SER FELIZ
Perdemos el foco cuando olvidamos esta otra gran verdad. Antes o después de juzgar a alguien recuerde siempre que esa persona solo quiere ser feliz. Lo único que ocurre es que en la mayor parte de ocasiones las personas no saben cómo serlo. Pero esa persona en la que usted ahora mismo está pensando no quiere realmente hacerle daño, ni atacarle ni faltarle al respeto. En el fondo lo único que quiere es ser feliz. A mi modo de ver la felicidad es sencillamente una elección de vida. He visto más veces sonreir mientras dormían a mendigos a los que suelo dar mi ropa, que a directivos despiertos con los que comienzo a trabajar en las sesiones. Sobre la felicidad hemos escrito y trabajamos largo y hondo en esta iniciativa. Si quiere obtener los mejores resultados en su trato con los demás, recuerde que las empresas siempre buscan beneficios y que las personas siempre buscan tan solo su felicidad.
TODA PERSONA AMA ALGO O A ALGUIEN
¡Cuántas imagenes deformadas de personas a las que tenemos cruzadas, se caerían si viéramos a esa persona abrazando a su hijo o hija o dando un regalo a su pareja! Por otro lado toda persona busca siempre un propósito. A veces lo encuentra y cuando lo encuentra lo ama. Relacionarnos con esa persona respetando o alimentando su propósito nos ayudará sin duda a obtener los mejores resultados.
TODA PERSONA ES EL TÉRMINO MEDIO ENTRE LO QUE A TÍ TE GUSTARÍA QUE FUERA Y LO QUE TÚ CREES QUE ES
Lea otra vez la frase. Aquí va: Toda persona es el término medio entre lo que a tí te gustaría que fuera y lo que tú crees que es. Nadie puede ser exactamente lo que tú quieres que sea. Nadie. Tampoco nadie es lo que tú crees que es. He aprendido a ser humilde en mis previsiones en las sesiones con equipos de trabajo. Sin excepción, cuando trabajo con personas sin exigir nada a cambio siempre obtengo sorprendentes resultados. A menudo el cliente me dice «era imposible imaginar que esa persona fuera capaz de hacer lo que ahora hace». El verdadero secreto consiste simplemente en esperar algo de las personas pero no en exigirlo. El matiz es determinante. Si quiere obtener los mejores resultados en su relación con los demás, repítase esra máxima: Toda persona es el término medio entre lo que a tí te gustaría que fuera y lo que tú crees que es.
TODA PERSONA LO HA PASADO EN ALGÚN MOMENTO BIEN Y EN ALGÚN MOMENTO MAL
Este pensamiento sanador -que por otro lado es rigurosamente cierto y universal- le ayudará a trabajar la compasión. Cuando hable con alguien, recuerde que esa persona -como usted- simplemente es otra persona que lo ha pasado en algún momentl bien y en algún momento mal. Más allá de la ideología, la forma de hacer las cosas o de comprender la vida (todos elementos diferenciadores) existe este pensamiento unificador que le ayudará a conectar con todo tipo de personas. Pregúntese cuando esa persona lo ha pasado o lo pasa mal y cuando lo ha pasado o lo pasa bien. Esto le ayudará a respetar el ritmo y momentl de la otra persona. Cuando conquiste este momento, usted experimentará algo parecido al principio de arquímides de las relaciones humanas. Un empuje vertical y hacia arriba cuyo valor ganado es igual a la cantidad de mierda (pensamientos deshumanizadores y ruido mental) que ahora desaloja. Parta por tanto de la base de que toda persona lo ha pasado bien y mal y que no solo usted lo ha pasado bien y mal, para obtener los mejores resultados.
TODA PERSONA ES ÚTIL PARA ALGO
En la sociedad de los especialistas, solemos cometer el triste error de considerar que alguien es inútil porque lo es para aquel área en el que nosotros queremos que sea útil. Pero nada realmente en la vida y en la naturaleza funciona de este modo. Las personas, al igual que los árboles cuando están a punto de ver la luz, siempre acaban encontrando su camino. Toda persona es siempre útil para algo. Hacer sentir útil a alguien es sencillo pero tremendamente innovador. Los resultados son sin ninguna excepción buenos. El proceso -repetido durante siglos pero no por ello menos sorprendente- es el siguiente: Una persona decide ser útil en algo, lo hace, usted reconoce que lo hace y se lo agradece (emplee para ello la mágica palabra GRACIAS), por último la persona sonríe y se muestra satisfecha. La carambola de todo esto llega cuando usted se siente útil y hace sentirse a otros valorados. Para muestra, esta breve historia…
Hace poco estuve de visita en Málaga y me senté junto a mi pareja y unos amigos en una terraza sorprendentemente llena. Enseguida comprendí por qué. Un camarero vino a atendernos. Al principio nos preguntó de dónde éramos y se preocupó por darnos unas recomendaciones sobre la ciudad, luego nos atendió excelentemente en todo momento siempre atento a nuestras necesidades. Al concluir nos dijo sonriendo «Bueno chicos, aquí tenéis vuestra casa siempre cuando queráis volver». Probablemente usted piense que ser camarero no es el mejor trabajo del mundo, lo único que yo se es que esta mañana recordando aquella terraza con esos mismos amigos, ninguno recordó que algunas empanadillas estaban frías aquel día pero todos recordamos a ese camarero. Si usted me preguntara qué opino de su trabajo, yo le diría dos cosas: la primera es que no creo que sea su vocación pero trabaja como si lo fuera (y es lo único que a mi como cliente realmente me importa para volver a esa terraza), la segunda es que si hoy me cruzara con ese muchacho por la calle, lo reconocería. Tal es el impacto de alguien que se hace y se sabe útil en algo.
Si quiere obtener buenos resultados, recuerde que las personas no son por sí mismas útiles o inútiles sino útiles o inútiles para según que aspectos. Recuerde también que todas las personas necesitan sentirse útiles y son útiles para algo sin excepción.
TODA PERSONA TIENE MIEDO
Los héroes de Marvel son una ficción fantástica. Salvo ellos, lector o lectora, todo el mundo -digo todo el mundo- vive acojonado. Incluso ese gran deportista que usted idolatra, tiembla y va varias veces al baño antes de un crucial partido. Si usted no lo cree recurra siempre a un truco. Recuerde que todos nacemos llorando, recuerde que todos luego vivimos varios años literalmente cagados y meados, recuerde que luego simplemente usted tan solo se contiene hasta que llega al baño pero que acaba sus días cada vez conteniéndose menos y menos todavía. Y luego -no tenga ninguna duda- interiorice que nadie es una excepción a todo esto. Si fisicamente esta es nuestra condición, imagínese mentalmente cómo estamos. Nada más que añadir. Si quiere obtener los mejores resultados en su trato con los demás, imagíneselos continuamente acojonados y usted acertará.
TODA PERSONA ACIERTA UNAS VECES Y SE EQUIVOCA OTRAS
Usted -estoy seguro- piensa que algunas personas nunca se equivocan. Incluso piensa, tan solo si su medidor de cretinez indica una cota máxima, que usted nunca se equivoca. Ni una cosa ni la otra, nada más lejos de la realidad. Recuerdo ahora un famoso pensamiento que encabezaba un artículo reciente. Rezaba así «Probablemente la razón es el único valor verdaderamente democrático. Todo el mundo cree tenerla». Lo que más me apasiona de mi trabajo no es el número de aciertos que es capaz de conseguir una persona en su proceso intensivo de desarrollo, sino la sorprendente cantidad de fallos que es capaz de cometer y soportar hasta que finalmente acierta. Lo que hace a una persona memorable no es el cómputo total de aciertos en su vida sino la increible capacidad de superación que demostró hasta tener tal vez tan solo uno o dos grandes aciertos pero precisamente eso… Memorables. Si usted quiere mejorar sus relaciones con los demás y obtener los mejores resultados, recuerde que ninguna persona es infalible, más bien todo lo contrario.
Espero, lector o lectora, que estas breves claves te ayuden a obtener mejores resultados en tus relaciones con los demás.
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por David Criado | Jul 20, 2015 | DESARROLLO DIRECTIVO

criterio.
(Del gr. κριτήριον, de κρίνειν, juzgar).
1. m. Norma para conocer la verdad. 2. m. Juicio o discernimiento.
LA IMPORTANCIA DE TENER CRITERIO PROPIO
«Una vida sin reflexión no merece la pena ser vivida«
Sócrates
Hablamos por lo general de tener sentido común pero nadie habla de tener un sentido propio.
Todas las personas son de algún modo respetables pero no existe ninguna persona digna de admiración capaz de vivir de acuerdo a los principios de otra. Entender esto es la base de todo crecimiento personal y profesional: todo el mundo tiene un criterio ajeno, muy pocos alcanzan un criterio propio.
Las sociedades de consumo en masa tienen grandes ventajas a nivel de democratización del uso de servicios en aspectos como el acceso generalizado a la higiene, los alimentos, el transporte, la ropa, la seguridad o la educación. Pero estas grandes conquistas tienen también un alto coste. Uno de ellos es sin duda la progresiva anulación del criterio propio. Consumimos la verdad, lo que implica que en la mayor parte de casos no nos planteamos conocerla.
En una continua lucha contra la despersonalización del individuo y la anulación de sus facultades intelectuales, nos convertimos inconscientemente en consumidores (followers) de principios ajenos y no en generadores de principios propios. El rodillo suele ganar la partida en la mayoría de los casos. Vivimos la mayor parte del tiempo condicionados por los moldes que aceptamos. La riqueza humana entonces se resiente al tiempo que nuestra capacidad relacional de generar valor se desvanece. La consecuencia directa es que perdemos progresivamente la capacidad de disfrutar la vida en todo su esplendor. Por contra, y aún promoviendo constantemente en los medios de comunicación masiva y en nuestras relaciones un comportamiento que atenta contra el criterio propio, se dan dos continuas paradojas universales que llaman a la frustración:
- En lo profesional nadie que yo conozca emplea ni apuesta por alguien que no tenga criterio propio. Esto ocurre porque para cumplir cualquier objetivo laboral en el terreno altamente competitivo del libre mercado es necesario cuestionar lo que heredas para poder mejorarlo. Y es completamente imposible hacer esto sin criterio propio. Porque tener criterio propio es tener la capacidad de examinar, digerir y organizar la realidad de todos para luego aportar tu propio valor consiguiendo que alguien te valore como único. Al margen de este apartado se encuentran aquellas empresas que anulan el criterio propio y que desde luego también existen pero que son en consecuencia incoherentes y poco competitivas. Piensa sin embargo que incluso este tipo de empresas detestables -en las que yo también he trabajado- intentan cada día aparentar que sus empleados tienen criterio propio y de hecho sus procesos de selección valoran mucho esta capacidad, aunque solo sea para luego destruirla o poder manipularla. En cualquiera de ambos casos -empresas coherentes y empresas detestables- es un hecho que tener criterio propio es algo clave.
- En lo personal nadie que yo conozco puede negar que le resulta más atractivo/a alguien con criterio propio. Esto se cumple en los ámbitos de las relaciones de pareja, amistad y familia. Por lo que es más complicado encontrar pareja, amigos y que te quiera tu familia si no consigues tener un criterio propio. Y esto ocurre porque las personas con criterio propio nos resultan apasionantes, retadoras, sorprendentes y nos hacen permanecer vivos y despiertos. Todo el mundo quiere quedar con alguien del que pueda aprender algo pero a nadie le apetece quedar con papagayos. Gustas más si claramente pareces que sabes lo que dices.
Por todas estas razones, solo un constante compromiso práctico con nuestra responsabilidad de cuestionar nuestras acciones y las de los demás, nos hace tener criterio propio. En este esfuerzo titánico radica la base de cualquier cosa admirable que logre un ser humano. Este artículo pretende arrojar un haz de luz sobre el increíble potencial que tiene la generación, construcción y entrenamiento del criterio propio. Comenzamos.
LAS BASES DEL CRITERIO PROPIO
«Hay dos maneras de difundir la luz: ser la lámpara que la emite, o el espejo que la refleja«
Lin Yutang
Denomino criterio propio al conjunto de asunciones básicas, principios en constante revisión y habilidades para poner en práctica esos principios y asunciones que favorecen la emisión de juicios respetables y la toma de decisiones genuinas.
Decimos que alguien es coherente cuando se atiene a sus juicios y decisiones y además cuando sus juicios y decisiones se atienen a sus principios. Por lo demás una persona coherente suele parecernos también una persona estable, digna de ser atendida o escuchada. Parece como si de algún modo liderarse a uno mismo fuera la única forma efectiva de que otros nos permitan liderarles.
En esta suerte de legitimación continua de nuestras acciones comienza la conquista de lo admirable. Porque el criterio propio ayuda a conquistar ese territorio perdido por la sociedad de consumo recuperando lo que denomino derecho de sitio. Esto es, la genuina facultad de todo ser humano para formular y actuar de acuerdo a su idea de la vida abrazando sus principios y de acuerdo a unos valores comunes y aceptados. La expresión o pensamiento tranquilizador «le puse en su sitio» o «me puse en su sitio» son dos de las lecturas del derecho de sitio a través de las cuales nos creemos constantemente en la obligación de recordar a alguien «cuál es su sitio» o de demostrar «cuál es nuestro sitio«. En la práctica real, el derecho de sitio implica saber tanto tu sitio como el momento adecuado para dejar que otros lo visiten.
La construcción del criterio propio parte de este modo de una idea fundacional: Compartimos y nos agrupamos de acuerdo a valores comunes y aceptados, pero cada cual construye sus principios. Así, las personas con criterio propio tienen foco, prestan atención constante a sus principios y toman decisiones de forma autónoma e independiente. Y para ello, como ya hemos dicho, cuentan con un conjunto de asunciones básicas, principios en constante revisión y habilidades para poner en práctica. En este artículo solo hablaré de las habilidades y las asunciones básicas necesarias para construir y entrenar el criterio propio. De construir luego tus principios y vivir de acuerdo a ellos, lector o lectora, ya te encargas tú.
ASUNCIONES BÁSICAS PARA LA CONSTRUCCIÓN DEL CRITERIO PROPIO
A continuación comparto contigo las asunciones básicas que creo necesarias para comenzar a construir tu propio criterio en las diferentes áreas de desarrollo y crecimiento de tu realidad:
- SENTIDO: Trabaja por una causa, no por un aplauso.
- AUTOAFIRMACIÓN: La autoafirmación es la formulación explícita del derecho de sitio. Consiste en valorar lo que uno es y no lo que otros tienen.
- PERSISTENCIA: Elige algo concreto, trabaja en ello de forma constante, insiste repetidamente, aguanta hasta el final y termínalo de forma que en un futuro tú te sientas orgulloso. Dice el maestro «eres lo que haces de forma repetida, de forma que la excelencia no es un fin sino un hábito»
- PRESENCIA: Woody Allen suele decir en sus entrevistas que el 80% de su éxito ha consistido simplemente en estar ahí. Coelho nos recordó hace tiempo que lo que ahoga a una persona no es el hecho de caerse al río, sino el hecho de permanecer sumergido en él. Eres este momento, ningún otro. Lo que eres depende tan solo de lo que ahora haces. Vive EN el presente PARA el futuro. Cada momento es único de forma que la muerte de alguien -pasado el duelo- no es algo triste; lo triste sería que esa persona no hubiera sabido vivir.
- ACEPTACIÓN: Dice Jung «Lo que niegas te somete, lo que aceptas te transforma». Asume que no controlas todo. Te mueves en sistemas de relación complejos en los que tú tan solo eres miembro o parte. Trabaja desde tí para mejorarte y mejorar a otros. Ellos que trabajen desde sí mismos para mejorarse y mejorar a otros. De eso tú no eres responsable. En el artículo 3 enemigos de la inteligencia humana señalábamos como uno de los más importantes confundir aceptación con resignación.
- RESPONSABILIDAD: Se consciente de tus facultades y responsable de tus actos. Solo puedes liderar aquello en lo que verdaderamente crees.
- AUTOCRÍTICA: No hay valor en quien es invulnerable. Todas las estrellas caen sin excepción; imagínate los hombres.
- APRENDIZAJE: Dice Gracián «No hay maestro que no sea discípulo». Esta máxima me acompañó siempre. No puedes saberlo todo y tampoco será nunca necesario.
- CERTEZA: En un instante de la película Peaceful warrior (Salva,2011), se recuerda que las personas piensan más de lo que saben y que la clave es centrarse únicamente en aquello que saben y no en lo que piensan. Vuelvo a escribir esta reflexión para que puedas leerla más despacio: Las personas piensan más de lo que saben; la clave está en centrarse únicamente en lo que saben y no en lo que piensan. Pensamos de forma continua e insistente generando una gran cantidad de ruido, pero en el fondo sabemos la mayor parte de soluciones y cosas importantes. La clave del criterio propio radica en dejar que broten poco a poco estas certezas. No tenemos certezas, las construimos.
- COMPASIÓN: Tu criterio propio no tiene por qué vencer a otro. De hecho solamente será útil cuando se muestre en todo su esplendor respetando el momento y la voluntad de ser y hacer de otros. Comprender el estado de crecimiento de alguien consiste en respetar tanto tu criterio propio como para que no te resulte necesario imponerlo.
HABILIDADES PARA EL ENTRENAMIENTO DEL CRITERIO PROPIO
Para cada una de estas asunciones básicas recomiendo los siguientes entrenamientos:
- ENTRENAR EL SENTIDO: Cuando inicié mi actividad profesional al margen de las grandes compañías consultoras creé esta iniciativa y lo primero que hice fue crear mi sentido. La carta de navegación de la iniciativa es ese sentido. Trata de redactar el tuyo y ser fiel a él en tu realidad diaria. No es necesario que siempre lo cumplas, tan solo que lo tengas como máxima de comportamiento para recurrir a él en caso de no saber cómo actuar o simplemente para evaluar una decisión que has tomado y saber si te has equivocado o no.
- LA AUTOAFIRMACIÓN: En cada reto o problema que se te presente, procura buscar respuestas dentro y no dedicarte a recopilar información de fuera. Trata por tí mismo de hallar la causa última de esa situación. La forma de entrenamiento más recomendable es la práctica de preguntas poderosas. La completa totalidad de los procesos de coaching están basados en descubrir este potencial y aprender a rentabilizarlo.
- ENTRENAR LA PERSISTENCIA: Sabes que eres capaz de hacer muchas cosas, no es necesario que vivas para demostrártelo. Simplemente elige algo concreto que se te de bien o que quieras y se fiel y constante con ello. Los chapuzas no gustan a nadie, se paciente y ordenado, crea tus propios hábitos y ponte fechas límite para evaluar cómo van yendo las cosas. El fenómeno del Efecto Pigmalión, también llamado Profecía autocumplida o Efecto Rosenthal te sorprenderá.
- ENTRENAR LA PRESENCIA: Deja de escucharte cuando hablen otros. Todo eso es solo ruido. Atrévete a escucharles y construir sobre lo que ellos dicen. Si necesitas estar en silencio o reducir la velocidad de la conversación, hazlo. Si necesitas hablar más despacio, hazlo. Haz todo aquello que te ayude a atender al otro o lo que ocurre. El artículo How to be someone people you love to talk to te ayudará a comprender cómo estar presente.
- ENTRENAR LA ACEPTACIÓN: Para saberte parte de un todo, nada mejor que intentar cumplir retos que impliquen poco o ningún compromiso por parte de los demás pero mucho por parte de tí mismo para darte cuenta de que los resultados son sorprendentemente buenos. Intenta luego lo contrario: cumplir compromisos que no dependan nada de tí pero mucho de los otros, y te darás cuenta del elevado número de fracasos que obtendrás. Aceptar que solo tú eres responsable de lo que haces y eliges cómo te afectará la responsabilidad e otros, te ayudará a vivir mejor. El artículo de Jennifer Delgado Quien te enfada, te controla te ayudará a comprender el poder de la aceptación.
- ENTRENAR LA RESPONSABILIDAD: La mayoría de personas no es consciente de las consecuencias de sus actos. Ignoran inconscientemente las situaciones y posibles derivaciones de aquello que hacen. La responsabilidad de creer en algo es muy alta en el balance costes y recursos invertidos en la mayor parte de casos. Para entrenar la responsabilidad considero que es necesario en primer lugar educarse en la finalización aceptable de las cosas. Esto es, entrenar la persistencia (ya hemos visto cómo hacerlo en un punto anterior). En segundo lugar es necesario partir de lo posible y no de lo deseado. El modelo de cambio razonable es una clara guía para logar resultados en este sentido.
- ENTRENAR LA AUTOCRÍTICA: El entrenamiento más certero para mejorar nuestra capacidad de autocrítica es el cuestionamiento. Como muchas personas parten de un cuestionamiento propio muy limitado, para entrenar la autocrítica recomiendo especialmente preguntar a los demás sobre las decisiones que adoptamos. Es decir usar las opiniones de los demás para empezar a ver cuál es nuestro verdadero sitio y partir de él. En una primera fase de INFORMACIÓN es muy útil preguntar a los demás por su opinión acerca de las decisiones que ya hemos adoptado. Esto contribuirá a crear elementos de juicio que serán la base de futuras conductas propias. En una segunda fase de FORMACIÓN es más recomendable preguntar a los demás antes de tomar nuestras decisiones de una forma respetuosa y sin caer en la exageración. De esta forma hacemos que el resto de personas se sientan valoradas. En una tercera fase de MADUREZ, deberíamos ser lo suficientemente maduros como para tener un criterio poder para saber cuándo debemos preguntar a las personas antes y/o después de nuestras decisiones.
- ENTRENAR EL APRENDIZAJE: Debido a que la sociedad actual está basada casi en exclusiva en intercambios de servicios entre especialistas, las personas corren el riesgo de olvidar que pueden aprender algo más de lo que saben. Varios ejercicios te ayudarán a aceptar con humildad esta realidad. El primero de ellos consiste en intentar resolver un problema matemático que estudiaste en el colegio p.e. en 2º de B.U.P. Esto te demostrará que el cerebro humano es adaptativo y elimina por completo aquello que no es útil, por lo que es necesario refrescar aprendizajes continuamente. El segundo de ellos consiste en intentar hacer algo que frecuentemente no hagas y haga otra muy bien otra persona con la que convivas. p.e. si no sueles cocinar, intenta hacerlo; si no sueles planchar, intenta hacerlo. Ejercicios tan sencillos te mostrarán como el cerebro humano puede aprender con agilidad cosas en tiempo récord. El tercer ejercicio consiste en que veas este video que mi compañero Alberto Barbero compartía con la red hoy mismo.
- ENTRENAR LA CERTEZA: El entrenamiento en certeza es similar al entrenamiento en autoafirmación. Mi entrenamiento favorito en procesos de acompañamiento con personas y equipos está basado en técnicas de silencio, meditación y consciencia. Una dinámica corporal muy buena consiste en mantener conversaciones guiadas por una cuerda que une tan solo aquellas intervenciones poderosas. Otra dinámica que he empleado con gran éxito a lo largo de estos años formando a personas consiste en mantener una atención selectiva basada en el silencio y la palabra ante intervenciones poco significativas y muy significativas respectivamente. Este premio logra que el resultado y la conducta de los equipos cambie de forma extraordinaria.
- ENTRENAR LA COMPASIÓN: Recientemente en una conversación con unos amigos hablábamos de temas sociales harto complicados y por lo general polémicos. Uno de mis amigos comenzó opinando sobre el tema con gran vehemencia. Su energía logró las simpatías de todos los asistentes menos de la mía. Yo estaba de acuerdo con él pero además por mi experiencia contaba con mi criterio propio sobre lo que opinaba la gente que no estaba de acuerdo con nosotros. Planteé que estaba de acuerdo con la idea y que contaba con mi plena simpatía y además expuse por qué creía que algunas personas de la sociedad fuera de aquella mesa no pensaban igual, añadiendo que era útil contar también con esas opiniones y perspectivas. A medida que avanzaba la conversación, mi amigo aumentaba su vehemencia tratando de convencernos de que otras opiniones no eran válidas en absoluto, hasta llegar incluso a menospreciar a aquellos que no pensaban igual. De forma progresiva y a medida que hablaba todos los miembros de la mesa fueron situándose en su contra aún pensando como él. Paradójicamente todos acabaron estando en desacuerdo con su opinión. Esta anécdota y otras me hace creer que una forma de entrenar la compasión es tratar de comprender al otro y partir de sus necesidades e inquietudes, y no de las nuestras. Para ejercitar esto resulta muy práctico vivir realidades ajenas a la nuestra, experimentar de forma real la vida de otros o atrevernos a salir de nuestro itinerario diario.
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Espero que este artículo te haya resultado interesante.
Si necesitas apoyo o ayuda en cualquier iniciativa, consulta nuestro catálogo de servicios de acompañamiento al cambio y formación y solicita más información a david.criado@vorpalina.com
por David Criado | Abr 30, 2015 | DESARROLLO PERSONAL

“Mujer sencilla, treinta años, bien en todos los sentidos y hasta ahora muy puesta a prueba sentimentalmente, ingresos medios de quinientos mil dólares anuales, busca señor, incluso calvo, honesto y sensible, para fundar un hogar prolífico. Escribir a Marilyn Monroe, Sutton Place, New York”.
Anuncio real aparecido en la prensa neoyorquina en 1955. Nunca recibió respuesta.
QUÉ ES LA DECISIONOMÍA
Es la caña de la montaña. Es la economía de las decisiones. Me lo acabo de inventar, pero funciona. La ciencia de la toma de decisiones que aporten beneficios. Sin más.
En este artículo pretendo prescribir sin receta un tratamiento rápido y útil para aquellas buenas personas que en su vida diaria se hallan en la acostumbrada situación de tener que decidir algo. Escribo este artículo porque compruebo a diario una desgracia: las buenas personas no suelen parecer muy prácticas y tienen peor marketing que las malas a lo largo de la Historia. Y yo, diría que de forma obstinada, cada día apuesto por las primeras. Dotarlas de este breve compendio para mejorar su toma de decisiones es solo un paso más.
Lees este blog. Eres hispanohablante, hombre o mujer de no más de 70 años, con inquietudes, conocimientos y experiencia. De modo que a la pregunta ¿Crees que eres una buena gente? tú respondes siempre SÍ. Luego este artículo también es para tí.
Como acabamos de comprobar que tu nivel de autocrítica está por los suelos, intentemos ahora trabajar solo tu bondad. Sirva este artículo para aportarte foco. Creo en tí, buena persona. Por ello, si tú crees que lo eres, este Manual de decisionomía para la buena gente te ayudará a practicarlo.
Tu toma efectiva de decisiones creo que puede impedir que las malas personas (que no son como tú, claro está, pero existen y tienen derecho a salir a diario a jugar este partido) se apoderen de tu mundo. La fe de todas las personas que conozco consiste en creer a personas increíbles, seres fantásticos o grandilocuentes que han logrado hazañas. Mi fe consiste en creer en las personas creíbles, seres extraordinariamente llanos que aprenden a vivir y disfrutar su vida. Admiramos a Marylin, la actriz depampanante, pero también matamos a Marylin, la chica que solo quería un poco de cariño y lo demandaba en los anuncios de periódico. Todo el mundo tiene derecho a sobrevivir; pero solo las buenas personas deberían tenerlo a vivir. Todas las personas merecen la pena; pero solo las buenas personas merecen la alegría.
Para todas aquellas personas cuya condición o labor consista en tomar continuamente decisiones, existen además artículos de humilde valor práctico en este mismo sitio que pueden ser también muy útiles. Comenzamos nuestro Manual de decisionomía para la buena gente. Plantéate cada uno de estos cinco puntos cada vez que tomes o te obligues a tomar una nueva decisión:
1.- TODO EL MUNDO TIEMBLA
No se por qué pero todos los valientes creen ser únicos. No se por qué pero todos los miedicas, también. Y el caso es que ninguno de los dos tiene ninguna estadística que juegue a su favor. Todos hemos sido valientes y miedicas. El mayor peso de uno u otro en tu vida es tan solo una cuestión de práctica y continuado entrenamiento. Eso que te pasa, eso sobre lo que tienes que decidir ahora… algún día le pasó o algún día le pasará a otros. Porque todo el mundo tiembla. No conocerás a nadie cuya fortaleza no se haya construido sobre sus limitaciones. Tu miedo a tomar una decisión no es único. Ese miedo es común a todos. Lo que verdaderamente te hace único es tomarla. Pero, créeme, todo el mundo tiembla. El éxito consiste en temblar sin que se note.
La mayor parte de decisiones que tienes que tomar en tu vida o tu trabajo, se parecen mucho a decisiones que tomaste o que tomaron otros. Y entonces tú, tanto como ellos, tuviste algo de miedo. Pero lo superaste. Hoy y ahora va a pasar lo mismo. Tu cuerpo tiembla solo para sacudir tus miedos.
2.- ESTO NO ES UN LEÓN
Decía Bruce Lee, el gran maestro de artes marciales, que esperar que la vida te trate bien porque eres buena persona, es como esperar que un león no te coma porque eres vegetariano. Muy pocas decisiones en la vida de una persona tienen que ver con enfrentarse a situaciones de vida o muerte sin apenas herramientas de defensa. Imagina a un león en mitad de la sabana y a una persona desvalida junto a un árbol que teme ser cazada por el animal. Salvo que ahora mismo la garra de ese león esté tocando el cielo de tu espalda, créeme, esto que ahora te pasa -aquello sobre lo que hoy debes decidir- no es cuestión de vida o muerte. Hagas lo que hagas, saldrás de esta. Relájate. Y para cuando aquello que te estés enfrentando sea un león, se realista y acepta tus posibilidades. Haz que jueguen hasta el último momento a tu favor.
La mayor parte de decisiones que tienes que tomar en tu vida o tu trabajo, no son decisiones de vida o muerte. Más bien tu crees que lo son porque eso supuestamente te garantiza ser alguien importante. Pero en realidad, ninguno de nosotros solemos estar en esas situaciones. Afortunadamente el ser humano dejó de sobrevivir hace unos cuantos años. Ahora, créeme, lo más cool es vivir.
3.- TU NO ERES TAN IMPORTANTE PARA OTROS
Para demostrarte que vales algo, no necesitas depender de otros ni hacer continuamente que otros dependan de tí. Tú vales oro por tí mismo. Eres lo que haces. En esto reside tu riqueza única y singular. Si crees que eres muy importante para otros y que esa decisión que vas a tomar puede afectarles, puede que estés en lo cierto o puede también que tú mismo no estés en tu lista de prioridades. Cuando alguien está en su propia lista de prioridades tan solo justo por encima de aquellos que le cuidan y a mucha distancia de aquellos que no lo hacen, entonces… entonces todo cuadra. Cuando intentas que otros comprendan tu decisión, realmente es porque tu no la comprendes. Sino de buena gana sabrías explicarla.
La mayor parte de decisiones que tienes que tomar en tu vida o tu trabajo, no son tan importantes para otros. Realmente solo son importantes para tí. Piensa en lo que realmente necesitas y no en contentar, convencer o satisfacer a otros. Nadie que no se ayude a sí mismo puede ayudar nunca a los otros. Solo comprendiendo esto puede que algún día puedas ser realmente importante para otros.
4.- TODA PERSONA ENCUENTRA SU LUGAR
El universo no se va a parar porque decidas rechazar o aceptar ese trabajo. Tampoco porque ese chico que te trata mal, desaparezca. No se va a hundir nada porque contrates o dejes de contratar a alguien. La vida continúa, y a toda persona que avanza, le llega su lugar. No llega ella a un lugar, sino que el lugar le llega. Cuando esto pasa decimos «Esa persona ha encontrado su lugar» Y a tí te pasará hoy o mañana tanto como a otros.
La mayor parte de decisiones que tienes que tomar en tu vida o tu trabajo, no determinan por completo el lugar de otros ni el tuyo. Cada persona encuentra su lugar. Y tú, créeme, eres solo una persona.
5.- SIEMPRE HAY ALGO MÁS IMPORTANTE
Si me dijeran qué creo que es la toma de decisiones, yo diría que es algo parecido a esto: Apostar por una opción que sea tan importante para tí y para otros como para renunciar en consecuencia al resto de las otras. Se vive en la duda pero aún más en el acto.
Rafael Reig escribió una vez: «Dicen que la vida discurre en zigzag, y que cada paso que damos va causando muertes. Al final de cada vida va quedando un ejército de cadáveres, todos vagamente parecidos a nosotros: cada uno de ellos es alguien que hubiéramos llegado a ser y no fuimos. Cada vida cumplida nos cuesta una matanza, una verdadera carnicería de otras vidas posibles para nosotros mismos. Para lograr una vida, una sola vida, tiene que morir toda una humanidad» Sacrificamos a diario toda una humanidad de nosotros mismos solo para que verdaderamente viva una persona. Porque la propia vida y actos reales de esa persona son tan importantes que, lector o lectora créeme, esa matanza de personas que pudo ser es sin duda una matanza necesaria.
La mayor parte de decisiones que tienes que tomar en tu vida o tu trabajo, tienen siempre un resultado más importante que los derivados de cualquiera de las demás opciones. ¿Qué decisión tendría un resultado más importante primero para mi y luego para otros? La importancia de las cosas tiene que ver la mayor parte del tiempo con valores antes bien universales que propios. Compasión y propósito, eso es lo que verdaderamente te hace grande. Siempre hay algo más importante: eres tú. Y siempre hay algo más importante aún: somos nosotros.
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por David Criado | Feb 26, 2015 | DESARROLLO PERSONAL

«¿Sabes lo que lloras?
No lloras algo que haya desaparecido en tal o cual año;
no se puede decir exactamente cuándo estaba aún aquí, ni cuándo partió;
sino que estaba aquí, que está aún aquí, está en ti.
Tú buscas una época mejor, un mundo más hermoso.»
Friedrich Hölderlin (Hyperion, 1794)
LA TEORÍA DEL DEMONIO INTERIOR
Hoy quiero compartir contigo -lector o lectora- uno de los mayores descubrimientos que he realizado hasta la fecha acerca del misterioso comportamiento humano, de lo que nos mueve y de cómo podemos convivir con ello de forma saludable. Este demonio interior está en cualquiera de nosotros en alguna u otra medida y forma parte -no me cabe duda- de lo que eres o puedes llegar a hacer con lo que tienes.
Lo que hoy comparto no es una teoría en sí misma y no es algo científico, pero sí algo realmente útil y práctico. Recordar nuestro demonio interior nos ayuda a controlar, obviar que existe le hace dueño de todo lo que somos y nos anula por completo. Esta es la única explicación plausible que un magnífico autor encontró para explicar en parte la existencia humana de muchos grandes genios. Contra esa teoría romántica del genio atormentado, la persona de la que hoy os hablaré postuló el perfil del genio creativo y saludable, incapaz de eliminar su demonio interior pero capaz de trasformarlo en algo prodigioso.
LA HISTORIA ÉPICA DE MI DESCUBRIMIENTO
Hace años en el marco de una adolescencia absurda y bella como cualquier otra, yo buscaba respuestas a una realidad social y personal que entonces se me iba de las manos. En aquel tiempo cercano los recursos de acceso a respuestas de cualquier adolescente español de clase media con auténticas ganas de aprender algo interesante se reducían a cinco.
El primero de ellos, sin duda, eran los amigos, cualquiera de los cuales casi nunca ofrecía una respuesta convincente al pertenecer a tu mismo rango de edad e inexperiencia. El segundo de ellos era la familia, cualquiera de cuyos miembros estaba mucho más experimentado que un amigo, pero que se limitaban en el mejor de los casos a dejarte con la duda y en el peor a soltarte una colleja. El tercer recurso era intentar sacar algo en claro del colegio, donde no era muy común encontrar a un profesor que quisiera preguntarte por algo que no estuviera en un libro de texto, los deberes o la materia que entraría en el examen. El cuarto recurso era un ordenador de mesa ahora prehistórico guiado por un router con sonido agonizante que tardaba horas en cargar una página web cuando casi todas ellas eran un pecado. El quinto recurso eran los libros de tu casa que solían ser viejos y muy poco atractivos si no pertenecían a alguno de los coleccionables por fascículos que los grandes periódicos regalaban los domingos.
Uno de esos días en que buscaba respuestas, y algo cansado como casi siempre de los cuatro recursos anteriores, opté por el último de ellos. Y descubrí en una estantería las obras completas de Stefan Zweig, y más en concreto un título fascinante que se llamaba La lucha contra el demonio, una trilogía sobre las luchas malditas de los poetas y dramaturgos Kleist y Holderlin y del filósofo Nietszche. Era una edición antigua, con letra diminuta y papel biblia. Entienda el lector o lectora que alrededor de 1996 no existían las geniales reediciones de Zweig que la editorial independiente Acantilado edita de forma exqusisita desde 2001. Este es el marco en el que empieza nuestra historia…
¿EN QUÉ CONSISTE EL DEMONIO INTERIOR?
El caso es que en la introducción que Zweig realizaba a su obra descubrí en qué consiste el auténtico demonio. No es una figura malévola con cuernos, es algo así como un impulso extraordinario y bello si se sabe controlar, pero destructivo y fatal si ni siquiera se conoce.
Fue un descubrimiento que me marcó profundamente y que aún hoy me acompaña. Creo que para cualquier persona atormentada (adolescente o directivo) estas palabras son mucho más que un bálsamo. Hace veinte años me calmaron y me dieron fuerzas, me acompañaron y me hicieron sentir único. Hoy después de veinte años, yo -lector o lectora- simplemente las comparto:
«Demonio, demoníaco. Estas palabras han sufrido ya tantas interpretaciones desde su primitivo sentido misticorreligioso en la antigüedad, que se hace necesario revestirlas de una interpretación personal.»
«Llamaré demoníaca a esa inquietud innata, y esencial a todo hombre, que lo separa de sí mismo y lo arrastra hacia lo infinito, hacía lo elemental.»
Es como sí la Naturaleza hubiese dejado una pequeña porción de aquel caos primitivo dentro de cada alma y esa parte quisiera apasionadamente volver al elemento de donde salió: a lo ultra humano, a lo abstracto.
«El demonio es, en nosotros, ese fermento atormentador y convulso que empuja al ser, por lo demás tranquilo, hacia todo lo peligroso, hacia el exceso, al éxtasis, a la renunciación y hasta a la anulación de sí mismo.»
En la mayoría de las personas, en el hombre medio, esa magnífica y peligrosa levadura del alma es pronto absorbida y agotada; sólo en momentos aislados, en la crisis de la pubertad o en aquellos minutos en que por amor o simple instinto genésico ese cosmos interior entra en ebullición, sólo entonces domina hasta en las existencias burguesas más triviales y, sobre el alma, reina ese poder misterioso que sale del cuerpo, esa fuerza gravitante y fatal. Por lo demás, el hombre comedido anula esa presión extraña, la sabe cloroformizar por medio del orden, porque el burgués es enemigo mortal del desorden dondequiera que lo encuentre: en sí mismo o en la sociedad. Pero en todo hombre superior, y más especialmente si es de espíritu creador, se encuentra una inquietud que le hace marchar siempre hacia adelante, descontento de su trabajo.»
«Esta inquietud mora en todo «corazón elevado que se atormenta» (Dostoievsky); es como un espíritu inquieto que se extiende sobre el propio ser como un anhelo hacia el Cosmos.»
Todo cuanto nos eleva por encima de nosotros mismos, de nuestros intereses personales y nos lleva, llenos de inquietud, hacia interrogaciones peligrosas, lo hemos de agradecer a esa porción demoníaca que todos llevamos dentro. Pero ese demonio interior que nos eleva es una fuerza amiga en tanto que logramos dominarlo; su peligro empieza cuando la tensión que desarrolla se convierte en una hipertensión, en una exaltación; es decir, cuando el alma se precipita dentro del torbellino volcánico del demonio, porque…»
«…ese demonio no puede alcanzar su propio elemento, que es la inmensidad, sino destruyendo todo lo finito, todo lo terrenal, y así el cuerpo que lo encierra se dilata primero, pero acaba por estallar por la presión interior.»
«Por eso se apodera de los hombres que no saben domarlo a tiempo y llena primero las naturalezas demoníacas de terrible inquietud; después, con sus manos poderosísimas, les arranca la voluntad, y así ellos, arrastrados como un buque sin timón, se precipitan contra los arrecifes de la fatalidad. Siempre es la inquietud el primer síntoma de ese poder del demonio; inquietud en la sangre, inquietud en los nervios, inquietud en el espíritu. (Por eso se llama demonios a esas mujeres fatales que llevan en sí la perdición y la intranquilidad.) Alrededor del poseso sopla siempre un viento peligroso de tormenta, y por encima de él se cierne un siniestro cielo, tempestuoso, trágico, fatal.»
«Todo espíritu creador cae infaliblemente en lucha con su demonio, y esa lucha es siempre épica, ardorosa y magnífica.»
«Muchos son los que sucumben a esos abrazos ardientes ‑como la mujer al hombre‑; se entregan a esa fuerza poderosa, se sienten penetrar, llenos de felicidad, para ser inundados del licor fecundante. Otros lo dominan con su voluntad de hombre, y a veces ese abrazo de amorosa lucha se prolonga durante toda la vida. Ahora bien, en el artista, esa lucha heroica y grandiosa se hace visible, por decirlo así, en él y en su obra; y, en lo que crea, está viva y palpitante, llena de cálido aliento, la sensual vibración de esa noche de bodas de su alma con el eterno seductor.»
«Sólo al que crea algo le es dado trasladar esa lucha demoníaca desde los oscuros repliegues de su sentimiento a la luz del día, al idioma.»
«Pero es en los que sucumben en esa lucha en quienes podemos ver más claramente los rasgos pasionales de la misma, y principalmente en el tipo del poeta que es arrebatado por el demonio; por eso he escogido aquí las tres figuras de Hölderlin, Kleist y Nietzsche como las más significativas para los alemanes, pues cuando el demonio reina como amo y señor en el alma de un poeta, surge, cual una llamarada, un arte característico: arte de embriaguez, de exaltación, de creación febril, un arte espasmódico que arrolla al espíritu, un arte explosivo, convulso, de orgía y de borrachera, el frenesí sagrado que los griegos llamaron pavta y que se da sólo en lo profético o en lo pítico.
«El primer signo distintivo de ese arte es lo ilimitado, lo superlativo del mismo; un deseo de superación y un impulso hacia la inmensidad, que es adonde quiere llegar el demonio, porque allí está su elemento, el mundo de donde salió.»
«Hólderlin, Kleist y Nietzsche son como Prometeos que se precipitan llenos de ardor contra las fronteras de la vida, de una vida que, rebelde, rompe los moldes y en el colmo del éxtasis acaba por destruirse a sí misma. En sus ojos brilló la mirada del demonio, y éste habló por sus labios. Sí, él habla por sus labios dentro de su cuerpo destruido y su espíritu apagado. Nunca se ve más claramente al demonio que albergaba en su ser que cuando puede ser atisbado a través de su alma destrozada por el tormento, rota en terrible crispación, y es a través de sus desgarraduras como se ven las oscuras sinuosidades donde se esconde el terrible huésped. En esos tres personajes se hace visible, de pronto, el terrible poder del demonio, que antes estuvo en cierto modo oculto, y ello sucede precisamente cuando su espíritu sucumbe.»
Para hacer resaltar mejor las características misteriosas del poeta poseso, he seguido mi método comparativo y he contrastado a esos tres héroes clásicos con otra figura. Pero lo opuesto al alado poeta demoníaco no es en modo alguno el no demoníaco; no, no hay verdadero arte que no sea demoníaco y que no proceda, como un susurro, de lo ultra terrenal. Nadie lo ha afirmado de modo tan rotundo como Goethe, el enemigo por antonomasia del poder del demonio, el que estuvo siempre alerta frente a ese poder, cuando dice a Eckermann, refiriéndose a esa cuestión: «Todo lo creado por el arte más elevado, todo aperçu…, no procede del poder humano; está por encima de lo terrenal.» Y así es: no hay arte grande sin inspiración, y la inspiración llega inconscientemente del misterioso más allá y está por encima de nuestra ciencia.
«Yo veo, pues, en contraposición al espíritu exaltado, arrastrado fuera de sí mismo por su propia exuberancia, frente al espíritu que no conoce límites, veo, digo, al poeta que es amo de sí mismo y que, con su voluntad humana, sabe domar al demonio interior y lo convierte en una fuerza práctica, eficaz.»
«Pues el poder del demonio ‑magnífica fuerza creadora‑ no conoce una dirección determinada, apunta sólo al infinito o al caos de donde procede.»
«Por tanto, es arte grande y elevado, y no inferior en modo alguno al que procede del demonio, aquel otro que crea un artista que domina por su voluntad ese misterioso poder, que le da una dirección fija, que lo sujeta a una medida, que «gobierna» en la poesía, en el sentido en que lo dice Goethe, y que sabe convertir lo inconmensurable en forma definitiva. Es decir, el poeta que es amo del demonio y no su siervo.»
Para gestionar ese demonio interior, a diario compartimos artículos y recursos desde la iniciativa. Te recomendamos seguirnos y mantenerte muy al día 🙂
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